La complejidad que implican las intervenciones quirúrgicas en el corazón enaltece lo logrado por los doctores Carlos Riera y Alberto Ramírez, jefe de cirugía, quienes trabajan en el Hospital Siglo XXI del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) e hicieron posible un trasplante de válvula el pasado 16 de agosto.
El beneficiario de este trasplante es José Diego Peralta Camacho, niño de 9 años originario de Acapulco, Guerrero, quien nació con un problema congénito de una estenosis valvular aórtica, un defecto que dificulta la apertura de la válvula aórtica, esto impide al corazón bombear sangre hacia la arteria principal del cuerpo.
Antes de que se concretara la intervención en el IMSS, el menor y sus padres acudieron a varios especialistas en cardiología. Las principales opciones se encontraban en el extranjero: Arizona y Barcelona eran dos de las alternativas sugeridas.
No obstante, al consultar a los doctores Carlos Riera y Alberto Ramírez, éstos les aseguraron que el trasplante se podía realizar en el Hospital Siglo XXI.
El procedimiento, hecho a corazón abierto, consistió en reemplazar la válvula aórtica del paciente, lo que fue todo un éxito. Por lo que los padres del menor agradecieron al personal del IMSS, en especial a la doctora Lucelly Yáñez Gutiérrez, jefa de Cardiología infantil y a los integrantes del Centro de Cardiología.
Noe Peralta, padre del niño, compartió que debido al mal con el que nació José Diego, ya ha tenido que ser intervenido quirúrgicamente en cuatro ocasiones. De esta forma, el menor superó una operación más la cual fue satisfactoria. GA
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