Enredado
Pasan los días y el enredo en el que se mete Fernández Noroña es cada vez mayor y, todo se debe, a lo que él intenta hacer para defenderse

Gerardo Fernandez Noroña.
/Redes Sociales
El senador Gerardo Fernández Noroña se enreda cada día más, pero con su propia lengua. Atrapado en el debate que él mismo abrió sobre la adquisición de su quinta de descanso en el paradisiaco pueblo mágico de Tepoztlán, Noroña sostiene y defiende que ha trabajado toda la vida y tiene derecho a hacer con su dinero lo que él decida, sin darle explicaciones a nadie.
Sin embargo, así como fue incapaz de clarificar el monto, el tipo de crédito y el banco que se lo otorgó, hoy no puede sostener cómo es que ha trabajado toda su vida si no tiene semanas de cotización en el IMSS, y en el ISSSTE sólo tiene aquellas que corresponden a sus periodos como legislador. ¿Acaso nunca, antes de ser representante popular, tuvo un empleo formal el senador clase premier? Que conste que es pregunta.