Las disputas legales sobre la redistribución de distritos podrían resultar en nuevos mapas del Congreso para las elecciones de 2024 en varios estados estadounidenses.
Esto podría alterar el equilibrio de poder en la Cámara de Representantes, que actualmente cuenta con una mayoría republicana de 219-212, con cuatro escaños vacantes.
La ajustada mayoría republicana podría verse reducida aún más esta semana, cuando los votantes del tercer distrito del Congreso de Nueva York elijan un reemplazo para el representante republicano George Santos, quien fue expulsado de la Cámara en diciembre tras ser acusado de fraude federal.
Los partidos están en disputa por los mapas redibujados después del censo de 2020. Los demócratas ya han ganado escaños en Alabama y Luisiana, mientras que los republicanos podrían asegurar tres adicionales en Carolina del Norte, con más sitios en litigio.
Aunque la redistribución de distritos no impactará la contienda por el Senado, donde cada estado tiene dos escaños, los demócratas enfrentan el riesgo de perder su estrecha mayoría de 51-49.
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En estados como Nueva York, un nuevo proceso legal ofrece a los demócratas la oportunidad de influir en los mapas del Congreso.
En Florida, un mapa respaldado por el gobernador republicano Ron DeSantis enfrenta desafíos legales que podrían redefinir la representación.
En Georgia, un juez federal ordenó la adición de un distrito de mayoría negra, mientras que en Carolina del Norte y Carolina del Sur, los republicanos podrían beneficiarse de nuevos mapas que favorecen su representación.
Las decisiones judiciales y los litigios en curso en varios estados podrían remodelar significativamente el panorama político en el Congreso de cara a las elecciones de 2024. BNM
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