Movimiento feminista desafía políticas conservadoras de Piñera en Chile
El actual movimiento es considerado el más grande registrado en el país, y busca que se hagan ajustes en las leyes para evitar la discriminación y el acoso, sobre todo en los planteles educativos
El mayor movimiento feminista en la historia reciente en Chile, que se ha ido sembrando en las últimas semanas, busca desafiar las políticas conservadoras del actual mandatario, Salvador Piñera, a quien exigen se hagan ajustes en las leyes para evitar la discriminación y el acoso. Miles de mujeres estudiantes han tomado más de veinte planteles de educación superior, que demandan a Piñera remover a los ministros de Salud, Emilio Santelices, y de Educación, Gerardo Varela; al primero, por modificar un decreto que llama a hospitales y clínicas a no practicar abortos, pese a que la ley sí lo permite; al segundo, por minimizar denuncias de acoso. https://twitter.com/KassWidemann/status/1008741452179034112 Uno de los orígenes de este movimiento fue el caso de Sofía Brito, alumna de Derecho de la Universidad de Chile, quien denunció por acoso sexual al profesor Carlos Carmona, entonces presidente del Tribunal Constitucional y académico en tres planteles superiores, que sólo recibió una suspensión de tres meses por “falta a la probidad”. Tras dos meses del inicio de las tomas de tres universidades y 27 facultades, éstas siguen completamente paradas. De acuerdo con las dirigentes de los movimientos, los actuales reglamentos contra el abuso que tienen las universidades estatales son insuficientes, pues de 60 planteles educativos sólo siete tienen su propio reglamento. https://www.youtube.com/watch?time_continue=123&v=0DdYnvPhU_c En diversas universidades los protocolos señalan que sólo hay abuso o acoso sexual entre profesores o funcionario, y no de docentes a estudiantes, lo que permite que haya más casos como el de Sofía Brito, en donde los agresores son amparados por las leyes. El movimiento ya ha sido escuchado, tan sólo el pasado 22 de junio el Poder Judicial aprobó un protocolo para prevenir, denunciar y garantizar el debido proceso en casos de abuso y acoso; sin embargo, el movimiento sigue creciendo, uniéndose a la ola feminista que ha despertado en Latinoamérica. (Con información de AP). AT