Gobierno de Trump expande la zona militarizada en la frontera con México

El Departamento de Defensa se encuentra ampliando una zona militarizada a lo largo de la frontera sur de Estados Unidos, aseguran medios y agencias estadounidenses.

En esta zona, las tropas están autorizadas a detener a personas que entran ilegalmente para un posible procesamiento federal por cargos de invasión de un área de defensa nacional.

La Fuerza Aérea anunció la semana pasada la anexión de un tramo de 250 millas de la frontera con Texas (402 kilómetros), en medio de un aumento de las fuerzas militares tras la declaración de emergencia nacional por parte del presidente Donald Trump, desde que asumió su segundo mandato.

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¿Dónde expandió EU la zona militarizada en la frontera con México?

Al respecto, un funcionario del Departamento de Defensa de EU declaró que la Marina también ha recibido instrucciones para establecer una nueva zona de defensa nacional en la frontera. Sin embargo, el funcionario no proporcionó más detalles.

La recién designada zona de defensa nacional terrestre y acuática a lo largo del Río Grande abarca dos condados de Texas (Cameron e Hidalgo) y se extiende junto a ciudades como Brownsville y McAllen.

El terreno fue transferido desde la Comisión Internacional de Límites y Aguas a través de la Administración de Servicios Generales, a la jurisdicción de la Base Conjunta San Antonio en Texas.

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En el área de defensa nacional integrada recientemente, las responsabilidades militares incluyen “mejorar la detección y el monitoreo” y “detener temporalmente a los intrusos hasta que sean transferidos a las autoridades policiales correspondientes”, indicó la Fuerza Aérea en un comunicado.

Por lo menos tres personas han sido detenidas directamente por tropas en Nuevo México para ser procesadas por la Patrulla Fronteriza.

Mientras que más de 1,400 inmigrantes han sido acusados de incursiones en las zonas de defensa nacional, un delito menor que se castiga con hasta 18 meses de prisión.

Dallas News retomó un cable de la agencia AP en el que se expone que esta estrategia militar inició en abril a lo largo de un tramo de 275 kilómetros (170 millas) de la frontera en Nuevo México y se expandió a una franja del oeste de Texas en mayo.

Por ello, cazadores, excursionistas y grupos de ayuda humanitaria temen que ya no tendrán acceso.

Con estas acciones, el gobierno de Trump buscan fortalecer su capacidad de respuesta ante incidentes de cruces ilegales y mejorar la vigilancia en una de las zonas más transitadas.

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