Inteligencia artificial y propiedad intelectual: el desafío de nuestros tiempos

8 de Octubre de 2024

Santiago Nieto
Santiago Nieto
Abogado. Profesor Universitario. Especialista en materia anti corrupción, electoral y PLD.

Inteligencia artificial y propiedad intelectual: el desafío de nuestros tiempos

Santiago Nieto

La inteligencia artificial (IA) ha transformado múltiples sectores, desde la atención médica hasta la educación y el entretenimiento. A medida que esta tecnología avanza, surgen importantes interrogantes sobre la propiedad intelectual (PI). La capacidad de la IA para crear, aprender y generar contenido plantea desafíos y oportunidades en el ámbito legal, ético y comercial. La propiedad intelectual se refiere a un conjunto de derechos legales que protegen las creaciones del intelecto humano.

›No obstante, algunos de los retos de la protección de la PI respecto a esta materia son, en torno a quién posee el contenido generado por la IA. Si una IA crea una obra original, ¿es el creador humano quien la programó, el usuario que la solicitó, o la propia IA? Esta ambigüedad ha llevado a debates sobre la necesidad de reformar las leyes de derechos de autor.

Por otro lado, algunas jurisdicciones han comenzado a considerar si las invenciones generadas por IA pueden ser patentadas. Sin embargo, la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos ha señalado que el inventor debe ser un ser humano, lo que limita la capacidad de proteger inventos creados enteramente por máquinas. El problema es qué humano. El que construye el sistema o el que ingresa la información?

Asimismo, la inteligencia artificial a menudo se entrena utilizando grandes conjuntos de datos que pueden incluir obras protegidas. Esto plantea preguntas sobre la legalidad del uso de tales datos sin el permiso de los titulares de derechos.

Ahora bien, también se presentan oportunidades en este campo para mejorar la gestión y protección de la propiedad intelectual como el apoyo de IA para detectar infracciones de propiedad intelectual en línea, facilitando la labor de monitoreo y protección de derechos; herramientas de IA pueden analizar bases de datos de patentes para ayudar a identificar tendencias e innovaciones; la posibilidad de personalizar contenido a través de IA podría llevar a nuevas formas de creación artística, ampliando las oportunidades para los creadores.

A medida que la IA continúa evolucionando, la legislación sobre propiedad intelectual deberá adaptarse para abordar la complejidad de la creación asistida por máquinas. Esto incluye la reformulación de leyes de derechos de autor para reconocer el valor de las obras creadas por inteligencia artificial; una definición clara de la autoría y derechos de las invenciones generadas por IA, o el establecimiento de directrices sobre el uso ético y legal de los datos para el entrenamiento de modelos de IA.

El avance de la inteligencia artificial plantea un desafío único para la propiedad intelectual. A medida que la línea entre la creación humana y la generada por máquinas se difumina, es fundamental que legisladores, creadores, los diversos sectores y la comunidad científica colaboren en la construcción de un marco legal que proteja los derechos de todos los involucrados. México no será la excepción en atender y regular este enorme campo de innovación y el uso de nuevas tecnologías, y fortalecer por otro lado, el marco de protección a la propiedad intelectual donde la IA se aplique.