Heineken 2026: reputación cuestionada

23 de Diciembre de 2025

Julio Pilotzi
Julio Pilotzi

Heineken 2026: reputación cuestionada

julio pilotzi

El escenario que enfrenta Heineken rumbo a 2026 es considerablemente más retador de lo que la narrativa corporativa suele admitir. La cervecera entra en un ciclo donde convergen la desaceleración estructural del consumo de cerveza, un endurecimiento regulatorio persistente, conflictos socioambientales de alto impacto y una presión creciente sobre márgenes y rentabilidad. En los mercados desarrollados, particularmente en Europa, el negocio muestra señales claras de agotamiento. Los volúmenes avanzan poco o retroceden, el consumidor es más sensible al precio y la inflación ha erosionado la capacidad de trasladar costos sin afectar la demanda. Al mismo tiempo, la competencia se intensifica y obliga a sostener inversiones comerciales más agresivas para defender participación de mercado, lo que reduce aún más el margen operativo.

La diversificación hacia bebidas sin alcohol y productos alternativos, aunque necesaria, no resuelve el problema de fondo. Estos segmentos suelen ofrecer márgenes inferiores y requieren inversión constante en innovación, mercadotecnia y distribución, lo que presiona el retorno sobre el capital en un momento en el que la compañía necesita disciplina financiera. En Europa, además, Heineken cuyo CEO en México es Oriol Bonaclocha, opera bajo un marco regulatorio cada vez más restrictivo en materia fiscal, ambiental y publicitaria, lo que eleva costos, reduce flexibilidad estratégica y expone a la empresa a sanciones y conflictos con autoridades y minoristas. Los ajustes de eficiencia y reestructuraciones internas, lejos de ser una solución estructural, reflejan la necesidad de contener un deterioro gradual del desempeño operativo.

En México, el panorama no es más alentador. El proyecto de la nueva planta en Yucatán, lejos de consolidarse como un caso ejemplar de expansión industrial, se ha convertido en un foco de desgaste reputacional y riesgo operativo. La ubicación del complejo en una zona ambientalmente sensible, cercana al Anillo de Cenotes y a la Reserva Ecológica Cuxtal, ha detonado una oposición social organizada que ya se traduce en protestas, movilizaciones y presión pública constante. Las acusaciones sobre el uso intensivo de agua en una región con estrés hídrico, la falta de una consulta social robusta y la opacidad en torno a los estudios de impacto ambiental colocan a Heineken en una posición defensiva, reactiva y con escaso margen de maniobra.

La inversión, estimada en 2 mil 750 millones de dólares entre 2025 y 2028, se ubica en una región cercana a la Reserva Ecológica Cuxtal y al Anillo de Cenotes, áreas clave para el equilibrio hídrico y la biodiversidad. Las críticas se centran en el riesgo para el acuífero, la presión adicional sobre un sistema hídrico ya deteriorado y la falta de información pública detallada sobre el impacto ambiental del proyecto.

La oposición social ha escalado más allá del debate público. Se han registrado protestas formales y movilizaciones en Mérida y otros puntos del estado, encabezadas por organizaciones como la Asamblea por la Defensa del Agua, que señalan el uso intensivo de recursos hídricos en una región cuya disponibilidad de agua se ha reducido de forma significativa en los últimos años. Estas acciones han elevado el perfil del conflicto y colocado a la empresa bajo un escrutinio creciente, en un contexto nacional donde los megaproyectos con impacto ambiental enfrentan cada vez mayores obstáculos sociales y regulatorios.

Más allá del debate ambiental, la empresa que en el mundo conduce como presidente y CEO, Dolf van den Brink, el caso exhibe deficiencias graves en la gestión de riesgos y en la estrategia de comunicación corporativa, no por ello no hace mucho dejaron a la emproblemada agencia de comunicación de nombre Serna, cuyo a dueño no dejan de emitir señalamientos de arrogante, altanero, soberbio, engreído, presumido, autoritario, y abusivo con sus empleados. Pero esta empresa ha permitido que el relato público sea dominado por críticas, sospechas y desconfianza, alimentadas por mensajes erráticos y una evidente falta de sensibilidad social. En un contexto donde los conflictos socioambientales han frenado o encarecido proyectos millonarios en sectores como energía, minería e infraestructura, el riesgo de retrasos, litigios y sobrecostos para Heineken es tangible. La inversión anunciada, lejos de ser un activo estratégico, amenaza con convertirse en un pasivo financiero y reputacional de largo plazo.

Este desgaste ocurre mientras la compañía enfrenta retos similares en otros mercados, donde el escrutinio sobre el uso de recursos naturales, la huella ambiental y las prácticas corporativas es cada vez más intenso. Para inversionistas y analistas, el riesgo no radica en un solo proyecto, sino en la acumulación de frentes abiertos que erosionan la confianza en la capacidad de ejecución de la empresa. Heineken llega a 2026 con menos margen de error, una estructura de costos presionada y una estrategia de crecimiento que depende de inversiones socialmente controvertidas y de mercados con menor dinamismo.

El resultado es un perfil de riesgo más alto del que sugieren sus métricas financieras actuales. Sin un giro profundo en la gestión socioambiental, una estrategia de comunicación creíble y una revisión realista de sus planes de expansión, Heineken corre el riesgo de enfrentar un periodo prolongado de crecimiento débil, conflictos recurrentes y deterioro de su reputación corporativa. En este contexto, la pregunta ya no es si la compañía puede crecer, sino a qué costo económico, social y financiero intentará hacerlo.

Voz en Off

La conexión del Tren Suburbano que enlazará al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) comenzará a operar durante el primer trimestre de 2026, afirma la presidenta Claudia Sheinbaum, al señalar que para la temporada de Semana Santa, que se llevará a cabo del 29 de marzo al 5 de abril de 2026, el público ya podrá utilizar este sistema de transporte para trasladarse directamente al aeropuerto ubicado en Zumpango, Estado de México, lo que permitirá mejorar la conectividad, reducir tiempos de traslado y fortalecer el acceso al AIFA desde la Zona Metropolitana del Valle de México….

juliopilotzi@outlook.com

@juliopilotzi

X: @juliopilotzi