Tejer puentes. Una labor indispensable del IECM

18 de Noviembre de 2025

Cecilia Aída Hernández Cruz
Cecilia Aída Hernández Cruz
Consejera Electoral del Instituto Electoral de la Ciudad de México

Tejer puentes. Una labor indispensable del IECM

Columna invitada_Redes

El pasado viernes 7 de noviembre, el Consejo General del IECM aprobó la creación de tres nuevas comisiones provisionales que trabajarán durante un año acompañando tareas específicas del Instituto. Entre ellas se encuentra la Comisión de Vinculación Institucional, cuya presidencia me fue conferida y que asumo con responsabilidad y entusiasmo. En esta columna quiero compartirles qué significa esta comisión y por qué su labor, aunque poco visible para muchas personas, es indispensable para que la democracia capitalina funcione de manera cercana, accesible y efectiva.

La vinculación institucional puede parecer, a primera vista, un concepto abstracto. Sin embargo, en el IECM tiene un sentido profundamente práctico: conectar al Instituto con otras instituciones, organizaciones y comunidades para que los derechos político-electorales de la ciudadanía capitalina puedan ejercerse plenamente. Esta tarea se sostiene gracias al trabajo de la Dirección de Vinculación con Organismos Externos, un área que hasta hace unos años era una unidad técnica y que, después de una reforma legal y una reestructura interna, opera como dirección. Su labor es silenciosa, ardua y constante.

Esta dirección desarrolla cuatro grandes líneas de trabajo que, aunque diversas, están profundamente entrelazadas. La primera de ellas es la relación con organismos nacionales. A través de esta línea, el IECM teje alianzas estratégicas que permiten maximizar recursos y fortalecer las capacidades institucionales. También se sostienen vínculos con organizaciones de la sociedad civil que apoyan actividades de educación cívica, y se mantiene un trabajo permanente con la comunidad académica que permite acercar el quehacer institucional, especialmente en épocas de procesos electorales y de participación ciudadana.

Otra línea fundamental es la relación con el INE. Todo lo que el INE comunica a los institutos electorales locales se gestiona a través de una plataforma digital que requiere seguimiento permanente. La Dirección de Vinculación distribuye internamente esas comunicaciones, da seguimiento a su cumplimiento y envía consultas de regreso cuando existe alguna duda técnica o procedimental. Lo que convierte a esta área en un corazón operativo que mantiene funcionando la coordinación entre autoridades electorales.

La tercera línea de trabajo es la vinculación con la comunidad chilanga en el extranjero. Se trata de un esfuerzo permanente para informar a la ciudadanía residente fuera del país sobre los mecanismos de participación que estarán disponibles en el próximo proceso electoral o de participación ciudadana. Esto incluye conversatorios, encuentros y una red de liderazgos migrantes que ayudan a replicar la información en distintos países, convirtiéndose en un puente indispensable con la diáspora. La cuarta línea es la vinculación internacional, mediante la cual el Instituto se mantiene atento a experiencias, innovaciones y coyunturas globales que pueden enriquecer la labor institucional. A través de esta ventana internacional es posible identificar tendencias y buenas prácticas que fortalecen la calidad de nuestra democracia local.

Presidir la Comisión de Vinculación Institucional implica acompañar, fortalecer y articular estas tareas. Y también significa enfrentar los retos inmediatos que tendrá el Instituto en los próximos meses. Uno de ellos es difundir ampliamente entre la diáspora chilanga los mecanismos de participación ciudadana disponibles, particularmente rumbo a la consulta de Presupuesto Participativo 2026, que se llevará a cabo en mayo. Esta posibilidad es reciente, representa un avance significativo en el reconocimiento de sus derechos y requiere una campaña de información clara, cercana, oportuna y constante.

Otro reto clave consiste en fortalecer los canales de comunicación con universidades, organizaciones de la sociedad civil e instituciones del gobierno capitalino, con el fin de sumar esfuerzos y hacer llegar información indispensable a la ciudadanía. En mayo de 2026 no solo se realizará la consulta de Presupuesto Participativo de ese año y la de 2027, sino también la renovación de las Comisiones de Participación Comunitaria, lo que exige una coordinación amplia para que todas las personas cuenten con información oportuna y confiable.

La vinculación institucional, aunque a menudo discreta, es fundamental para el movimiento democrático. A través de ella se construyen puentes que permiten que las decisiones se tomen mejor, que la información fluya y que la ciudadanía pueda ejercer plenamente sus derechos. Este año me corresponderá acompañar de cerca esa tarea, y desde aquí compartiré cómo avanzamos en ese propósito común: fortalecer nuestra vida democrática.