La falta de un diagnóstico de su capacidad operativa y de las líneas de acción a seguir, así como de la brújula de un Programa Nacional de Búsqueda; la ausencia de lineamientos para integrar grupos estatales de búsqueda, y la contratación de personal sin experiencia ni certificación, son parte de los pendientes con los que Karla Quintana deja la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB).
Luego de cuatro años y medio en el cargo, en los que la cifra de más de 111 mil personas desaparecidas en el país aumentó en más de 44 mil en este gobierno, Karla Quintana Osuna renunció con “carácter irrevocable y efectos inmediatos” a la titularidad de la CNB, que asumió el 9 de febrero de 2019.
Aunque en los dos años de su designación en la comisión, Quintana buscó ser la secretaria ejecutiva de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) —proceso en el que llegó a ser finalista—, fue hasta este miércoles que hizo pública la carta de renuncia que envió al presidente Andrés Manuel López Obrador “en virtud de los contextos actuales”.
Al ser cuestionado esta mañana sobre los motivos que llevaron a la renuncia de Quintana, el Presidente minimizó el hecho y consideró que la hoy exfuncionaria “cerró un ciclo” y fue libre de hacerlo; además informó que será la secretaria de Gobernación, Luis María Alcalde la encargada de nombrar a la persona que la sustituya.
“Se está haciendo una búsqueda en todo el país, y ya pronto vamos a tener un informe. Se ha avanzado bastante, en muchas partes hay buenas noticias porque se están encontrando jóvenes, personas que se habían considerado desaparecidas en el censo que se tenía originalmente, pero se sigue trabajando”, aseguró el mandatario.
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El contexto actual en materia de desapariciones en México es alarmante y crítico, ante lo cual el alto comisionado de la ONU reprochó al Estado mexicano no actuar “con firmeza para combatir este crimen atroz”. Ante esto, activistas y madres buscadoras exigen que quien llegue a la CNB en verdad se ocupe de atender y apoyar a los colectivos y familiares de desaparecidos.
De acuerdo con personas buscadoras que hablaron para ejecentral, la poca sensibilidad y falta de compromiso que mantuvo Karla Quintana al frente de la Comisión trajo consigo más retrocesos que avances.
“Nos quedó a deber demasiado. Las expectativas fueron muchas y las acciones en favor nulas; todas las búsquedas fueron a petición de las familias, no por iniciativa de un plan de trabajo. Dejar la comisión es también un problema pues es el momento de establecer presupuesto para el funcionamiento de la comisión nacional y las estatales”, señaló Silvia Ortiz, vocera del colectivo de búsqueda Grupo Vida.
Por su parte, Cecilia Flores, líder fundadora del colectivo Madres Buscadoras en el estado de Sonora, se pronunció porque la salida de Karla pueda mejorar en la búsqueda de personas, pues sostuvo que “el pedirle transparencia en el tema, con las cifras de desaparecidos ocasionó un disgusto para ella”.
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