Estar privadas de la libertad no ha sido obstáculo para que 475 personas contrajeran nupcias al interior de los centros penitenciarios, incluso en aquellos donde reciben tratamiento psiquiátrico.
El Sistema Penitenciario de la Ciudad de México informó que durante 2019 se celebraron 475 bodas en los centros de reclusión, con lo que el gobierno capitalino contribuye a que las personas reclusas ejerzan su derecho a formar una familia.
Hazael Ruiz Ortega, subsecretario de Sistema Penitenciario, refirió que la mayoría de los matrimonios se celebró en el Reclusorio Norte, con 211; mientras que en el Reclusorio Oriente hubo 96, en el Sur 48, en la Penitenciaría 21 y en el Módulo Diamante otros 21.
El funcionario agregó que en el Centro Varonil de Santa Martha hubo 20 enlaces; en el Femenil, 19; así como 16 en el Centro Varonil de Seguridad Penitenciaria (Cevasep I), 18 en el Cevasep II, tres en el Anexo Oriente, uno en el Anexo Norte y uno en el Centro Varonil de Rehabilitación Psicosocial (Cevarepsi).
Ruiz Ortega detalló que adicional a las 475 bodas que se realizaron este año, el Registro Civil ofreció la oportunidad de que las personas privadas de la libertad pudieran registrar o reconocer a sus hijos sin costo alguno.
Las campañas de matrimonios civiles colectivos que se realizan al interior de los centros penitenciarios de la capital permite la unión civil de las parejas sin costo de trámite y la expedición gratuita de la primera acta certificada.
El servidor público expresó que estas acciones a su vez facilitan los trámites de acceso de visitas en los días de convivencia familiar.
Resaltó la importancia que da el Gobierno de la Ciudad de México al acto de regulación de la situación jurídica de las personas privadas de la libertad con sus parejas e hijos. JCR