¿Por qué parecemos “destinados” a repetir una y otra vez los mismos errores? Si nos detenemos a analizar la historia de la humanidad, encontraremos que formamos parte de un círculo vicioso donde los errores se repiten uno detrás del otro. Por ejemplo, sabemos lo negativo que resulta una guerra, sin embargo nos mantenemos peleando, seguimos siendo inconscientes y continuamos sin adquirir la capacidad para proponer soluciones ecuánimes.
Otro ejemplo son las fuertes crisis económicas que golpean el mundo capitalista desde hace ya varios años, una y otra vez: el mismo error que se cometió el 24 de octubre de 1929, Martes Negro, se repite en el 2008. ¿Cuál fue el error? La ambición sin límite.
Regresemos a la historia y a la terrible avaricia de querer ser dueños del mundo: Alejandro Magno, Napoleón Bonaparte, dictadores, papas, reyes, presidentes y todo aquel que llega o ha llegado al poder, busca conquistar de alguna u otra forma lo que hay más allá del horizonte.
La pregunta a esto sería: si ya lo sabemos, ¿por qué vuelve a suceder? ¿Por qué el ser humano se encariña con la piedra y busca cometer los mismos errores que se cometieron en el pasado, a sabiendas del resultado final?
Pensé que se trataba de un patrón negativo, así que indagué en la psicología. Les comparto la respuesta que encontré del psicoanalista Freud y del psiquiatra J.D Nasio.
Freud creía que hay dos motivos principales: eros (la energía de la vida) y tanatos (la energía de la muerte). Eros sería nuestro instinto de conservación y tanatos sería la búsqueda insaciable del placer sublime; según Freud este estado sólo se consigue con la muerte, por eso de forma inconsciente repetimos errores para llegar a la búsqueda del bienestar absoluto.
J.D. Nasio, siguiendo la misma línea de pensamiento, señala que todo ser humano tiene un inconsciente que lo lleva a repetir comportamientos que brindan felicidad y bienestar, pero también tenemos un inconsciente que nos lleva a repetir conductas que están vinculadas al dolor, fracaso y a la frustración. Para el psiquiatra, Nasio, la repetición de neurosis provoca un goce que nos conduce a repetir conductas que son dolorosas (muy parecido a un patrón negativo). Estas conductas se esconden en el subconsciente, esperando el momento oportuno para salir y hacer destrozos.
De la misma forma que es importante conocer la historia para evitar que un país y el pueblo cometan los errores de toda la vida, así de importante es aprender a conocernos. Sólo así lograremos comprender que parte de la tendencia natural del cerebro es repetir patrones (errores) y dejaremos de pelear con el “destino macabro del hombre”.
Entonces, ¿cuándo llegan los cambios?
Con el tiempo. Todos los cambios reales requieren de años y hasta siglos, porque cambiar una creencia o un patrón necesita mucho tiempo, esfuerzo y trabajo. Cambiar un pensamiento conlleva al cambio radical de una acción y, por lo mismo, es lento. Por eso es tan importante no olvidar, aprender a aceptar, trabajar con nuestra naturaleza y ser pacientes. Todo llega por añadidura.
Hace unos días me preguntaban si yo creía que después del terremoto, México iba a regresar al olvido tal y como sucedió en el 85. Yo contesté que eso dependía de nosotros y de lo dispuestos que estuviéramos para hacer un cambio. También contesté que es probable que yo no viva para verlo pero lo que sí aseguré, fue que mientras viva, seguiré poniendo mi granito de arena para que la gente no olvide.
Frases para pensar:
“Dicen que la historia se repite, lo cierto es que sus lecciones no se aprovechan”, Camille Sée.
“Quizá la más grande lección de la historia es que nadie aprendió las lecciones de la historia”, Aldous Huxley.
“El mayor miedo del hombre es el sufrimiento, por eso se teme tanto a sí mismo”, Rebeca Pal