Se agudiza violencia contra activistas
El clima de violencia contra activistas ha implicado que en lo que va del año al menos una docena de defensores de Derechos Humanos han sido asesinados
Ayer lunes, Simón Pedro Pérez López, activista tzotzil y expresidente de la organización Las Abejas de Acteal, fue asesinado a balazos cuando acudió con su hijo a realizar unas compras en el centro de Simojovel, Chiapas.
El viernes pasado, David Díaz Valdez, defensor ambientalista quien denunció por años la contaminación de la termoeléctrica ‘General Manuel Álvarez Moreno’, murió al ser baleado en Manzanillo, Colima.
El clima de violencia contra activistas ha implicado que en lo que va del año al menos una docena de defensores de Derechos Humanos han sido asesinados, de acuerdo con el registro de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, ante lo cual organizaciones civiles advierten que este tipo de crímenes, una problemática que se ha venido arrastrando en gobiernos anteriores, se mantiene vigente en el actual gobierno.
Apenas en abril pasado, La Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas y Todos” (Red TDT) alertó que en los primeros dos años del gobierno de Andrés Manuel López Obrador habían sido asesinados alrededor de 45 personas defensoras de derechos humanos.
Tras el asesinato de Simón Pedro, al que también se sumó el de Luis Urbano Domínguez Mendoza, líder defensor de los recursos naturales de la tribu yaqui, quien el 8 de junio pasado murió baleado en Ciudad Obregón, la CNDH informó que de 2006 al 5 de julio de este año, suman 72 activistas asesinados.
En el marco de esta situación, este martes, integrantes del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULT) iniciaron movilizaciones en al menos cinco regiones de Oaxaca para exigir paz en la región Triqui, ya que denuncian que desde su fundación – a inicios de la década de los años 80- a la fecha suman más de 400 de sus militantes asesinados.