SANTIAGO, CHILE. La inversión extranjera directa en América Latina (IED) creció 13.2% en 2018 respecto al año anterior, sumando 184,287 millones de dólares, en su primer registro positivo en cinco años en la región, informó este miércoles la Cepal.
A contramano de la tendencia mundial, la IED mostró una gran heterogeneidad entre los países de la región y tuvo a Brasil y México cómo grandes motores de expansión.
A nivel general, el avance regional de la IED se explica por el aumento “de la reinversión de utilidades y de los préstamos entre compañías”, y “no se fundamentó en el ingreso de aportes de capital, que sería la fuente más representativa del renovado interés de las empresas por instalarse en los países de la región”, dijo la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en su informe.
“La mayor parte del crecimiento de la IED en 2018 se explica por las mayores inversiones en Brasil (88.319 millones de dólares, 48% del total regional) y México (36.871 millones de dólares, 20% del total”, agrega el informe del organismo de las Naciones Unidas, con sede en Santiago.
Pese a la expansión “preocupa que el aporte de capital, que es el más importante a la larga, que cayó 20% entre 2017 y 2018", advirtió en rueda de prensa Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de Cepal, que recordó que los prestamos entre compañías son “el componente más volátil” a la hora de medir la inversión.
Con este panorama y las turbulencias que vive el comercio global, con China y Estados Unidos enfrentados, y la decisión de los países desarrollados de restringir las inversiones en el extranjero, la Cepal espera un menor aporte de inversión extranjera directa en 2019, con una caída de hasta un 5% en las entradas de IED, según el informe.