El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte fue vinculado a proceso por tres de los siete delitos que la Fiscalía de Veracruz le imputaba. Un juez del fuero común capitalino priorizó los delitos de peculado, incumplimiento de un deber legal y tráfico de influencias que cometió durante su mandato.
El juez Júpiter López Ruiz consideró que no se debía de enjuiciar al ex mandatario por cinco diferentes delitos relacionados entre sí. Por lo que desestimó cuatro de los delitos señalados y realizó la vinculación a Peculado de la carpeta de investigación 56/2017 y Tráfico de influencias e incumplimiento de un deber legal por la carpeta 38/2017.
Las investigaciones estatales seguirán por seis meses más por parte de la Fiscalía veracruzana por el caso de los 220 millones de pesos, recursos de la Comisión de Aguas del Estado de Veracruz (CAEV), por la omisión del proceso de entrega recepción cuando solicitó licencia y finalmente, el viaje en un helicóptero oficial hasta Coatzacoalcos, de donde después huyó.
En una audiencia que duró dos horas y cincuenta minutos, la fiscalía de Veracruz presentó los datos que acreditaron de inicio que Duarte habría participado en los delitos mencionados.
De inicio, la defensa del exgobernador, encabezada por Ricardo Sánchez Reyes Retana, desistió de los testimonios de Flavino Ríos Alvarado, implicado y vinculado a proceso en la carpeta 38/2017; y del testimonio de Maurio Audirac, ex secretario de Finanzas, involucrado en el proceso 56/2017.
Durante el debate de los datos de prueba, la defensa de Duarte responsabilizó a Flavino Ríos de haber dado la orden para que este tomara la nave aérea y llegara hasta Coatzacoalcos. Además, hicieron mención de que Francisco Valencia y Mauricio Audirac, también eran los únicos responsables por el desvío millonario pues, según la defensa, no existían pruebas que acreditaran la participación de Duarte en el delito de peculado.
La defensa de Duarte cuestionó la veracidad de las firmas y los documentos utilizados por la Fiscalía veracruzana y defendidos por el Ministerio Público de la Ciudad de México.
Duarte se mantuvo en silencio durante toda la audiencia, principalmente con un gesto adusto y ahora vestido con una guayabera color Caqui de cuatro bolsas y un pantalón de tono más oscuro. Por cada audiencia que pasa, Duarte tiene una barba aún más descuidada y larga.
El juez Júpiter López llevó la audiencia de forma ágil y no permitió que los argumentos entre ambas partes se personalizaran. Sólo se debatieron los tres delitos que fueron vinculados al político cordobés.
Durante su resolución, el impartidor de justicia decidió vincularlo por el delito de mayor penalidad, pues consideró que no se podía enjuiciar cinco crímenes por un solo hecho.
En esta parte del juicio, el juez no tomó en cuenta la legalidad de las pruebas. Además, se dirigió a Duarte para decirle que “no le estoy diciendo que usted cometió un delito, estoy tomando hechos razonables para ampliar una investigación necesaria”.
Duarte solicitó la palabra y preguntó: “Sólo para que quede claro, ¿de los siete delitos sólo quedarán tres? (…) Osea que de siete delitos, quedan tres”; Júpiter López confirmó el veredicto a lo que Duarte sólo se mostró serio.
El ex gobernador seguirá en la cárcel pues se justificó la Prisión Preventiva Justificada y por solicitud de la defensa se asignaron seis meses de investigación complementaria.