Analítica | Latin power

La música latina ha tenido un boyante ascenso en la industria musical de Estados Unidos en los últimos 10 años, marcada principalmente por artistas del género urbano y reggaetón.

En un año en el que Bad Bunny fue el artista con más reproducciones en el mundo, estrellas como Becky G y Anitta anotaron varios éxitos en las listas musicales, y al mismo tiempo el público ha vuelto a acudir a espectáculos en estadios y arenas, a medida que aumentaban las presentaciones en vivo.

La Asociación de la Industria Discográfica Estadounidense (RIAA, por sus siglas en inglés) publicó una lista con las ventas discográficas de artistas de origen latinoamericano en Estados Unidos. En medio del boom de la música digital, sorprende que el primer sitio en lo que respecta a álbumes vendidos en territorio estadounidense, corresponde a la fallecida cantante texana, Selena Quintanilla, quien registró 10.86 millones de discos.

Lo alcanzado por la famosa Selena sorprende aún más, pues ningún artista de origen latinoamericano se acerca a estos números. Más de siete millones de discos la separan del segundo cantante latino con el mayor éxito de ventas, conocido como el rey de la bachata, Romeo Santos.

Vicente Fernández, la estrella de la música ranchera, se ubica en el tercer lugar, con 3.6 millones de álbumes vendidos. En la cuarta y quinta posición se encuentran el astro del género urbano, Bad Bunny, con 2.58 millones; Maná y Shakira, con 2.34 millones de unidades, respectivamente.

Para determinar estas cifras, además de tomarse en cuenta las ventas físicas, también se hizo un seguimiento de las ventas y reproducciones digitales, por lo que un álbum vendido equivale a mil 500 streams de audio o video, o bien a 10 canciones vendidas a través de plataformas de streaming.

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