Carlos Ghosn, presidente de Renault, sale de prisión vestido de obrero

10 de Mayo de 2025

Carlos Ghosn, presidente de Renault, sale de prisión vestido de obrero

El empresario tiene prohibido abandonar Japón, no tiene acceso a internet y sus salidas y llegadas están vigiladas

Uno de los abogados de Carlos Ghosn admitió el viernes “un fracaso” desastroso por la imagen del magnate del automóvil, que salió de prisión vestido con uniforme de obrero, y se disculpó, aduciendo que lo que pretendía era que su cliente no llamara la atención.

Grabado y fotografiado desde varios puntos con una gorra azul, un uniforme de obrero de carreteras, gafas y una mascarilla blanca, el expresidente de Renault-Nissan fue objeto de burlas en los medios de comunicación.

Uno de sus defensores, Takashi Takano, reconocible por su barba blanca, explicó en su blog que había tenido esa idea para esquivar la atención de los periodistas posicionados delante de la prisión y evitar que siguieran al exdetenido hasta su nuevo domicilio.

“Fui yo el que planeó y preparó ese disfraz”, escribió. “Por culpa de este plan de aficionados, la reputación que Ghosn se construyó durante toda su vida quedó empañada”, lamentó.

La estratagema no logró engañar a nadie. Una multitud de periodistas esperaban la salida del exdirectivo, con un despliegue de medios impresionante, desde helicópteros y grúas hasta andamios para poder inmortalizar la salida de Ghosn de la cárcel, tras su arresto el 19 de noviembre de 2018.

“Fue un fracaso”, reconoció el abogado. “Perjudiqué a muchas personas. Lo siento”. Ghosn fue liberado el miércoles tras el pago de una fianza de 1.000 millones de yenes (unos 8 millones de euros), al cabo de más de 100 días de detención en Tokio por unas acusaciones de malversación financiera. Pese a todo, los medios pudieron localizar la nueva residencia de Ghosn y este viernes los periodistas lo filmaron saliendo de su casa, llevando una gorra oscura, con su mujer y sus hijas.

El empresario brasileño-franco-libanés tiene prohibido abandonar Japón, no tiene acceso a internet y sus salidas y llegadas están grabadas por cámaras de vigilancia.