Cuando Gatell reaccionó, el virus llevaba 18 días
El primer contagio de Covid-19 en México no ocurrió el 29 de febrero sino el 7; el primer deceso en el país no tuvo lugar el 21 de marzo, sino el día 3
La pandemia por Covid-19 comenzó a diseminarse de forma comunitaria tres semanas antes de que el primer caso positivo por laboratorio fuera confirmado por el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell. Se trata de un paciente de la Ciudad de México que no tenía antecedentes de viaje, lo que incluye contacto con personas que hubieran regresado del extranjero, y cuyos síntomas comenzaron el 6 de febrero.
Este paciente, que podría ser el primer caso de Covid-19 en México, no figuraba en la base de datos abiertos de la Dirección General de Epidemiología (DGE) hasta el 6 de octubre, fecha en que se integró la información sobre contagios que fueron catalogados como positivos al nuevo coronavirus mediante dictaminación médica, y no por una prueba de laboratorio.
La integración de este tipo de pacientes confirma que el nuevo coronavirus ya circulaba de forma comunitaria en 30 estados antes del 23 de marzo, fecha en que se inició la Jornada Nacional de Sana Distancia y en la que el discurso sobre los contagios importados seguía presente en las recomendaciones de las autoridades de salud; de hecho, en promedio hubo un desfase de 7 días entre el inicio de este tipo de diseminación y la detección del primer caso de este tipo.
La nueva definición de caso positivo a Covid-19 por asociación, que suma a la estadística oficial a las personas que tuvieron síntomas, pero que no se realizaron una prueba de laboratorio para SARS-CoV-2 y obtuvieron resultado positivo por dictamen médico, desplaza 22 días antes el inicio de la pandemia en México.
Pero no sólo los contagios se vieron afectados por esta nueva definición, también los fallecimientos tuvieron un ajuste en donde la primera muerte por Covid-19 se desplaza del 21 al 3 de marzo, es decir 18 días antes.
Además, entre ese periodo de tiempo se registraron otros cuatro fallecimientos que fueron dictaminados como muertes por coronavirus mediante asociación, por lo que no figuraban en la base de datos abiertos hasta inicios de esta semana.
›Cuatro de estos casos fueron pacientes que se atendieron en la Ciudad de México; sin embargo, uno de los fallecimientos registrado el 18 de marzo ocurrió en Durango, estado que no reportó su primera muerte oficial por coronavirus hasta una semana después. El mayor desfase en este registro lo tiene la capital del país con 17 días de diferencia, le sigue la entidad del norte con seis y Puebla con una diferencia de cinco.
En el resto de los estados el desfase entre la primera muerte ocurrida y la fecha en que fue confirmada por las autoridades de salud es nula, aunque quedan 14 mil 123 muertes sospechosas que podrían agregarse a la base de datos de la Dirección General de Epidemiología (DGE), mediante el modelo de asociación y que podrían modificar este resultado.
Sin embargo, todos los fallecimientos que se registraron antes del 21 de marzo, tampoco tenían antecedentes de viaje o contacto con personas que hubieran regresado del extranjero en fechas recientes, por lo que su contagio ocurrió a nivel local, entre los primeros días de ese mes y los últimos de febrero.
En cuanto al desfase en contagios, Puebla presenta la mayor brecha entre el primer caso real y el detectado con 22 días de diferencia; es decir, tres ciclos de contagios, que pudieron impactar en el desarrollo de la pandemia en ese lugar, especialmente en la implementación de medidas de contención y mitigación basadas en la vigilancia epidemiológica que partió con casi un mes de retraso.
›La situación de desfase se repitió en casi todo el país, en donde las medidas de contención se ajustaron a los casos que resultaron positivos únicamente por prueba de laboratorio, lo que provocó un desfase de al menos 7 días entre los contagios comunitarios, que no se tomaron en cuenta para la estrategia de muestreo en ese momento por no tener antecedentes de viaje.
El no tomar en cuenta la posible transmisión comunitaria desde sus primeros signos, y restringir la prueba de laboratorio a quienes hubieran viajado, impactó en los tiempos de respuesta frente a la pandemia ya que las medidas de distanciamiento social y cuarentena se tomaron cuando el nuevo coronavirus ya se transmitía de forma comunitaria.
