De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2021, en México el 74.1 por ciento de la población adulta y 38.2 por ciento de la población infantil tienen sobrepeso u obesidad.
En el marco del Día Mundial contra la obesidad, que se conmemora el 4 de marzo, se destaca que México es actualmente, detrás de Estados Unidos, el segundo país del mundo con mayor índice de personas obesas.
La obesidad ha sido catalogada como “la epidemia del Siglo XXI” debido a los altos índices de prevalencia de esta enfermedad y que afecta a la población desde temprana edad y hasta la vida adulta. Además de ser el principal factor de riesgo de enfermedades crónico-degenerativas como la diabetes mellitus tipo 2, hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares.
“Es muy importante no ejercer discriminación a las personas que viven con obesidad, hay que eliminar el estigma que se tiene hacia la propia enfermedad y a sus tratamientos. Luego de tratar a miles de personas con esta enfermedad durante 25 años, la obesidad afecta esferas emocionales, físicas, conductuales, familiares y laborales. Entendemos el impacto que tiene la enfermedad”, comentó el Doctor Gilberto Ungson, Cirujano Bariatra certificado.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), señala que la obesidad ha alcanzado proporciones epidémicas a nivel mundial, se estima que desde 1975 esta enfermedad se ha triplicado, tanto que en 2016 incrementó a 1900 millones de adultos y 340 millones de niños y adolescentes.
Las recomendaciones de la OMS para combatir la Obesidad se concentran destacan el limitar la ingesta energética procedente de la cantidad de grasa total y de azúcares, pero también existen procedimientos quirúrgicos.
El Bariclip es un dispositivo diseñado para reducir el tamaño del estómago, está hecho de titanio con un revestimiento de silicona que rodea el estómago de forma vertical y brinda resultados similares a los obtenidos con una manga gástrica: genera un estómago reducido por donde pasa el alimento.
“Algunos de los beneficios de esta técnica son que se coloca por laparoscopia y no se corta ni retira ninguna parte del estómago, sino que el implante quirúrgico se coloca verticalmente paralelo a la curvatura menor del órgano y la estructura anatómica se modifica dividiéndolo en dos segmentos de manera temporal, lo cual provoca una restricción de la capacidad de ingesta, generando como consecuencia la pérdida de peso”, destacó Ungson.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), ha detectado que, por primera vez en la historia del mundo, la población con exceso de peso superó a quienes están desnutridos.