El periodismo se ejerce entre dos fuegos
Periodistas reflexionan sobre la libertad de expresión en México
EJECENTRAL
Nahum Torres | @nahjum
A menos de 24 horas de que sea presentado el “Informe anual de violencia contra la prensa en México” 2015, reporteros de diferentes entidades del país ofrecieron un testimonio sobre las condiciones actuales, en el que la violencia ha superado toda lógica.
Ante decenas de estudiantes los periodistas acudieron al llamado de la organización Artículo19 para discutir respecto a los retos, avances y retrocesos en materia de libertad de expresión, tanto en México como en América Latina. A las mesas de debate, realizadas durante el miércoles 16 en el Museo Franz Mayer de la Ciudad de México, expertos de Colombia, Brasil, Argentina y México compartieron su visión respecto a las tendencias y dificultades que atraviesa el ejercicio periodístico. Resaltó cierta visión pesimista entremezclada con la búsqueda de soluciones, entre ellas, la conformación de redes de periodistas que lo mismo funcionan como grupos de capacitación que como “escudos” de protección para los reporteros que trabajan en zonas consideradas de alta peligrosidad para ejercer el periodismo.
“Nunca ha habido un peor momento para ejercer el periodismo independiente”
La directora general del semanario Zeta, Adela Navarro, refirió que, como país, hemos sido testigos del crecimiento de los cárteles de la droga del crimen organizado. “Había siete, hoy hay 20 agrupaciones”, mismas que “nos tiene presionados; y a muchos nos ha llevado a la autocensura y a otros nos ha llevado a cerrar (medios)”.
En la mesa sobre las ‘tendencias en América’ (sic), Navarro Bello afirmó que “nunca ha habido un peor momento para ejercer el periodismo independiente” y aseguró que los periodistas se ubican “entre dos fuegos: la amenaza del crimen organizado y la manipulación del gobierno de la República”.
Refirió que el hostigamiento sistemático que vivió Zeta en Tijuana, en la década de los noventa, actualmente “se vive en todo el país” resultado, dijo, “de la impunidad de los políticos y su incapacidad --ya sea por omisión o por complicidad-- para combatir el crimen doloso”.
“El caso de veracruz es el más sintomático”, agregó.
Isaín Mandujano, del portal Chiapas Paralelo coincidió: “la región más crítica es Veracruz; duele lo que está pasando porque todo esto queda en impunidad”, dijo.
Exhortó al gremio a ser solidarios ya que “vivir con incertidumbre es lo más grave en este país: en Oaxaca, Veracruz y Guerrero los gobernantes no solo no garantizan la protección sino además uno se tiene que cuidar de quienes se supone deben de cuidarte”, denunció.
Ante este panorama aseguró que “lo más fácil es hacer un periodismo pazguato, light, ya que en los estados hacer periodismo crítico, de investigación, “no es fácil”. De manera que instó a poner “el dedo en la llaga” y denunciar “los mecanismos en boga para intimidar y acallar a los periodistas”.
“Somos nuestro propio escudo”
Flavia Morales, de ABC Noticias de Veracruz, corroboró que en México se vive la peor etapa para el periodismo principalmente por el alto grado de impunidad en los casos de violencia hacia los reporteros. “Ante la falta de móvil siempre se criminaliza a los periodistas”, acotó.
Recordó que a la fecha van 17 periodistas asesinados y cinco desaparecidos en Veracruz; entidad que ocupa el segundo lugar en número de periodistas protegidos por parte de la Secretaría de Gobernación.
De acuerdo a Morales, en dichas investigaciones la fiscalía estatal “tiene deficiencias” ya que, mientras algunos de los asesinos de periodistas están libres, los que están en prisión carecen de proceso penal.
Denunció que en Veracruz no hay garantías para ejercer el periodismo libre, por lo que “el gremio se ha unido para protegerse. Somos nuestro propio escudo”.
Por su parte Pedro Matías, corresponsal en Oaxaca de la revista Proceso, refirió que “las cifras pueden ser frías y generan frustración”, sin embargo, aseguró que fue a partir de situaciones adversas que agrupaciones como Artículo19, Periodistas de A Pie y CENCOS se acercaron a los reporteros oaxaqueños para asistirles en el uso de herramientas de (auto)protección o para afrontar las agresiones.
Afirmó que en dicho estado existe un mecanismo de protección para periodistas pero éste “no resuelve, pues se queda en estadísticas: estoy seguro que 95% de los casos se van al archivo y no proceden”.
“No nos alcanzaba el día para tener miedo”
La reportera del Diario Juárez y cofundadora de la red de periodistas de dicha entidad, Gabriela Minjares, dijo que en su caso fue complicado pasar de ser quien hace la nota a ser actor y víctima del escenario de violencia.
Recordó que Ciudad Juárez es emblemática por sus contrastes, al ser frontera con Estados Unidos el escenario de violencia es común. Tan solo de 2006 --con el inicio de la llamada guerra contra las drogas-- al 2010 se reportaron 3 mil homicidios. Entre masacres “no nos alcanzaba el día para tener miedo”, dijo.
“La violencia nos puso al desnudo: teníamos carencias de rigor, de balance, de autoprotección"; incluso “se pugnaba por una limpieza en las redacciones”, agregó. “Así que creamos una red de periodistas, apéndice de Periodistas de A Pie. Desde 2011 hemos trabajado, en 2013 nos constituimos y así hemos profesionalizado a periodistas en activo, los que están en la calle”, afirmó.
Con esta labor de capacitación entre periodistas es como han continuado ejerciendo el periodismo.
El director del Diario Noreste, Adrián López, retomó a Adela Navarro Bello y dijo que vivir entre la amenaza del crimen organizado y la presión oficial ha sido una constante. Tan solo en 2014 el rotativo sufrió 100 amenazas latentes, por lo que ante la falta de respuesta por parte de las instituciones oficiales optó por buscar aliados entre la sociedad civil. “Creamos un colectivo llamado Congreso Abierto. Buscamos que la sociedad sepa cual es nuestro rol”.
“Guerrero está literalmente podrido”.
En una de las participaciones más pesimistas, Ezequiel Flores, corresponsal de Proceso dijo que “hablar de Guerrero es sinónimo de tragedias”.
Al referirse al contexto sociopolítico de la entidad, recordó que en Guerrero “tenemos la mayor presencia de soldados desde los setentas y paradójicamente somos la entidad que ocupamos el primer lugar en producción de heroína y homicidios dolosos”, afirmó.
Durante su reflexión sobre los dilemas actuales en el oficio periodístico dijo que existe un fuerte nivel de autocensura en los medios de la entidad. “El mecanismo de protección funciona para cooptar periodistas; la publicidad oficial carece de transparencia” y agregó que ha sufrido intimidaciones anónimas así como amenazas de muerte por parte de políticos vinculados con la delincuencia.
En los últimos doce años, 23 periodistas mexicanos permanecen desaparecidos. Tamaulipas representa la entidad con mayor número de casos (seis); le sigue Veracruz (cinco) y Michoacán (cuatro).
De acuerdo a la organización Artículo19, la mayoría de estos casos están vinculados con coberturas informativas relacionadas con corrupción política y crimen organizado.