El gobierno del Estado de México no tuvo una gestión eficiente y transparente de los recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA) ni del Programa Prospera, apegada a la normativa que regula su ejercicio que cumpliera sus objetivos. En el primer caso se provocó un probable daño al erario por mil 270 millones 224 mil pesos, y un subejercicio de tres millones 275 mil pesos, según el informe de la Cuenta Pública 2016. En el segundo caso, existe un posible daño por 36 millones 624 mil pesos, y un subejercicio por 73 millones 948 mil pesos. Entre las anomalías detectadas, la ASF identificó que el Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) realizó en 2016, dos mil 92 pagos con los recursos del FASSA por un monto total de 23 millones 639 mil 600 pesos, por concepto de pago de medidas de fin de año a personal del que no se encontró registro alguno en las nóminas del Fondo.
›El ISEM también realizó pagos por concepto de Cuotas y Aportaciones Obrero-Patronales de Seguridad Social con recursos del FASSA 2016, por un monto total de 573 millones 661 mil de pesos, que incluyeron recargos y actualizaciones por nueve millones 113 mil pesos.
La ASF instó al Servicio de Administración Tributaria (SAT) a que instruya una auditoria al ISEM, debido a que no entregó las retenciones por concepto de Impuesto Sobre la Renta de octubre, noviembre y diciembre de 2016, de las que se calculó un daño patrimonial a las finanzas nacionales por 414 millones tres mil 138 pesos. También solicitó la SAT una segunda auditoria para fiscalizar 84 millones 274 mil 991 pesos que fueron utilizados para el pago de recargos y actualizaciones generados por el pago extemporáneo del ISR. Así mismo, la ASF, llamó al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) para que aclare si recibió un pago por 59 millones 498 mil 509 pesos por parte del Instituto de Salud del estado de México, correspondientes a las Cuotas y Aportaciones SAR-FOVISSSTE de sus trabajadores, que no fueron reportadas por instituto de salud mexiquense en la auditoría 2016. Y en el caso del programa federal Prospera las irregularidades encontradas por los auditores son en torno a las dobles cuentas bancarias del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) para la recepción y manejo de los recursos del PROSPERA, y el manejo de otras fuentes de financiamiento. Estas observaciones derivaron en cinco promociones de responsabilidad administrativa sancionatoria y tres pliegos de observaciones. Esto llevó a la Auditoría Superior a dictaminar que el gobierno del Estado de México no realizó una gestión eficiente y transparente de los recursos del programa, y no se cumplieron sus objetivos ni metas.
Pagan trabajos fantasmas
La construcción del Viaducto Conexión Interlomas-Nueva Autopista Naucalpan-Toluca, en el Estado de México, a cargo de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), presenta irregularidades estimadas en 23 millones 135 mil pesos, que están pendientes de aclaración por parte de las autoridades federales. El proyecto que se construye en el municipio de Huixquilucan busca mejorar las condiciones operativas de la infraestructura vial, consistente en la construcción de un tramo vial con una longitud de poco más de siete kilómetros, que comienza en el cruce con la avenida Palma Criolla y se liga con la carretera libre México-Huixquilucan, la autopista La Venta-Lechería y con la carretera federal Naucalpan-Toluca. La ASF sostuvo en su revisión que en el contrato de obra pública número 2-O-CE-A-687-W-0-2, la SCT omitió vigilar y controlar el desarrollo de los trabajos en cuanto a su costo, a pesar de eso, autorizó pagos a favor del contratista por 229 mil pesos, por excedente de obra sin que haya presentado evidencia que lo comprobara. Otro pago que la STC autorizó fue por cuatro millones 452 mil pesos, en los conceptos no previstos en el catálogo original por demolición de concreto, anclajes de varillas y cimentación, que según la ASF resultaron ser “obra falsa”. En la misma situación de obra pagada y no ejecutada se detectaron montos por 10 millones 885 mil pesos, otro por cuatro millones 451 mil 982 pesos, uno más por cuatro millones 819 mil de pesos y otro por 251 mil pesos. Todos estos montos forman parte del proyecto para la construcción del Viaducto. Sobre estos pagos, el reporte de la ASF reveló que, hasta diciembre de 2016, fecha de terminación del contrato, no se habían ejecutado los trabajos. También se autorizó un pago por siete millones 178 mil pesos, sin verificar si los tableros y equipos cumplían con lo pactado de manera contractual.