Militares, marinos y expolicías federales se incorporaron a la Guardia Nacional sin haber cumplido con todos los requisitos de ingreso, incluyendo las evaluaciones de control de confianza, ni el curso de Formación Inicial Policial. Aunado a ello, un deficiente despliegue pone en riesgo el cumplimiento del principal objetivo de estos guardias nacionales: disminuir la incidencia delictiva en el país
Así lo dio a conocer la Auditoría Superior de la Federación (ASF) como parte de la tercera entrega del informe de la revisión de la Cuenta Pública 2019, que en la auditoría de desempeño aplicada a la corporación conformada por elementos del Ejército, la Marina y la extinta Policía Federal se detectó que, “existieron elementos asignados que no cumplieron con la totalidad de requisitos de ingreso ni con la Formación Inicial Policial; asimismo, también se observó que el despliegue operativo no se realizó en función de la incidencia delictiva como lo prevé la planeación de mediano plazo”.
Si bien el órgano fiscalizador recuerda que hay un plazo máximo de dos años para que los guardias nacionales cuenten con las evaluaciones respectivas y obtengan su Certificado Único Policial (CUP), que los acredite como integrantes de esta institución policial-civil, de la revisión a los expedientes de los elementos de la Policía Federal, la Defensa Nacional y la Marina transferidos a la Guardia Nacional, “se constató que ningún elemento acreditó contar con ella”.
Durante 2019, la Secretaría de la Defensa Nacional asignó a 33 mil 971 policías militares a la nueva corporación; la Secretaría de Marina hizo lo propio con 9 mil 415 policías navales y, por parte de la desaparecida Policía Federal, al 31 de enero de 2020 se transfirieron 21 mil 854 elementos.
Tras la revisión al cumplimiento de los requisitos por parte de los efectivos de las Fuerzas Armadas la ASF comprobó que al cierre de 2019 el 97.1% de los expedientes de policías militares analizados, es decir 369, no cumplieron con todos los requisitos; y en esa misma circunstancia se ubicaron los 357 (96.5%) de los policías navales revisados. No obstante, luego de los resultados finales y observaciones preliminares de la Auditoría, ambas instituciones acreditaron la implementación de controles para la revisión de documentación para la integración y resguardo de los expedientes.
Pese a que el envío de guardias nacionales a las zonas del país con la mayor incidencia está contemplado en su plan de mediano plazo, y que la corporación aún se encuentra en etapa de conformación, la ASF advierte que, de “no corregir las deficiencias se corre el riesgo de que los elementos responsables de la seguridad pública no cuenten con una formación policial civil; y que su despliegue no contribuya a la baja de incidencia delictiva en los estados”.
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A la falta de evaluación, formación y certificación de los guardias nacionales, y a un incorrecto plan de operaciones en su despliegue, se suma una serie de deficiencias en el manejo presupuestal y el ejercicio de los recursos con los que cuenta.
Con base en la auditoría de cumplimiento a las erogaciones de la corporación, se descubrieron pagos por compensación a elementos, sin que se contara con las evidencias de que fueron entregados a los elementos para quienes deberían ir dichos recursos; en otros casos no se acreditaron los pagos que debían hacerse, y en una tercera evidencia de estas anomalías se evidenciaron pagos en demasía, sin que se acreditara que fueran recuperados y reintegrados a la Tesorería de la Federación.
En total, la ASF advierte que de la suma de esos malos manejos por parte de la GN se provocó un probable daño a la Hacienda Pública Federal por un monto que ascendió a los 18 millones 364 mil 702 pesos, pues no se acreditó la dispersión del pago por concepto de “compensación” a 5 mil 576 elementos del Ejército y la Marina asignados a la Guardia Nacional por un monto arriba de 15 millones 817 mil pesos.
Así como el no acreditar que se realizaron los pagos por el mismo concepto a mil 384 elementos asignados a la Guardia Nacional por 2 millones 546 mil 883 pesos; y en contraste se efectuaron pagos en demasía a 26 elementos por 53 mil 200 pesos.