La red CLAP y su trama en México

25 de Abril de 2024

La red CLAP y su trama en México

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Estados Unidos investiga a varias empresas y una decena de mexicanos por posibles operaciones con funcionarios venezolanos y narcotraficantes colombianos

La red de corrupción que descubrió el Departamento de Justicia de Estados Unidos abarca a más empresas de las que se conocían hasta ahora, revelan documentos en poder de ejecentral.

El 19 de junio pasado, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a dos empresas con sede en México, así como a tres connacionales: Joaquín Leal Jiménez, Olga María Zepeda Esparza y Verónica Esparza García, por su presunta vinculación en una amplia red para evadir las restricciones que el presidente estadounidense Donald Trump impuso a Petróleos de Venezuela, SA (PdVSA).

Documentos a los que este periódico tuvo acceso evidencian que dos de las principales empresas que participaron en este esquema enfocado en triangular millonarias importaciones de alimentos desde México hacia Venezuela, mediante el programa denominado Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP), son Group Grand Limited, y la filial de esta, constituida en territorio mexicano bajo el nombre de Group Grand Limited Sociedad Anónima.

›El esquema de los CLAP fue creado por el mandatario venezolano Nicolás Maduro en 2016, cuando Venezuela registraba una severa escasez de alimentos básicos y medicinas.

Group Grand Limited, registrada en Hong Kong en 2013, tiene como socio principal a Shadi Nain Saab Certain, sobrino del empresario colombiano Alex Nain Saab Morán, detenido el pasado 12 de junio en Cabo Verde, y quien es señalado por las autoridades estadounidenses como prestanombres tanto del expresidente venezolano Hugo Chávez Frías, como de Nicolás Maduro; así como vínculo con el empresario mexicano Leal Jiménez para ayudar en la venta de petróleo crudo de origen venezolano a través del programa fechada de “petróleo por alimentos”.

La filial de esa empresa, constituida como sociedad anónima y con todos los registros de las Secretarías de Relaciones Exteriores y Economía el 13 de marzo del 2017, tiene sus oficinas en el 116 de la calle Goldsmith, en la zona de Polanco de la Ciudad de México. Según su acta constitutiva, el 99% de sus acciones eran propiedad de Group Grand Limited, y el 1% restante de Santiago Uzcátegui Pinto, un venezolano quien ingresó al país como turista para constituir la empresa.

La administración pasó a Andrés Eduardo León Rodríguez y Emmanuel Enrique Rubio González, quien es hijo de Germán Enrique Rubio Salas, que es el nombre verdadero de Álvaro Enrique Pulido Vargas, quien al igual que Saab Morán, es considerado socio y testaferro de los expresidentes venezolanos.

Según consta en los documentos revisados por este semanario, al bimestre de haberse registrado la filial, junto con Group Grand Limited se enfocaron en la distribución de despensas en todos los estados de Venezuela, principalmente entre los grupos y organizaciones afines al chavismo.

El primer golpe

El 30 de noviembre de 2018, el último día oficial del gobierno de Enrique Peña Nieto, se anunció el bloqueo de más de 20 empresas mexicanas y personas físicas que habrían participado en las ventas de despensas a los contratistas del programa CLAP, como parte de una denuncia de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. En esos bloqueos se incluyó a Alex Nain Saab Morán; Shadi Nain Saab, ya Álvaro Pulido Vargas, cuyo nombre real es identificado por las autoridades como Germán Enrique Rubio Salas y fue señalado como uno de los mandos principales del Cártel de Bogotá; así como Emmanuel Enrique Rubio González; Andrés Eduardo León Rodríguez; y Santiago Uzcátegui Pinto.

La información recopilada por las áreas de inteligencia sobre Group Grand Limited Sociedad Anónima, identificaron que durante 2017, a través de esta compañía se exportaron hacia Venezuela al menos 7 millones de despensas, con una variedad de 11 productos adquiridos en México que incluyen: leche en polvo, lentejas, harina de maíz, arroz, frijol negro, aceite vegetal, azúcar, pasta, mayonesa, salsa de tomate y atún en lata. Y que fueron distribuidas con la leyenda impresa de “Hecho en México”.

Para la adquisición y empaquetado de las despensas las empresas de Group Grand Limited habrían subcontratado a otras empresas que operan en México, entre las que destaca la denominada como El Sardinero, la cual se encargaba de empacar los productos en su planta de Cuautitlán Izcalli, para después trasladarlos a la Terminal Intermodal de Ferrocarril Pantaco, para ser enviadas a la compañía naviera Hapag-Lloyd, en el puerto de Veracruz, para su embarque y finalmente trasladarlas hacia el puerto de La Guaira, en Venezuela.

Entre enero y marzo de 2018, El Sardinero se ubicó a la cabeza de los vendedores de alimentos para los CLAP, al acumular en ese periodo un total de 24.016 toneladas en productos que fueron empaquetados y enviados a Venezuela, entre los que se incluyeron varias toneladas de arroz, mayonesa, aceite, frijol, leche en polvo y harinas, entre otros.

Tanto Group Grand Limited como su filian en México han recibido contratos para la venta de millones de despensas alimenticias que son entregadas por el gobierno de Venezuela, bajo la denominación de “cajas CLAP”, las cuales han sido adquiridas con sobreprecios calculados en hasta 120% más en comparación a los precios con los que fueron compradas en México y otros países.

Otra de las empresas vinculadas al gobierno venezolano para la distribución de estas despensas es Postar Intertrade Limited, con registro en Barbados, cuyo socio principal es Samark López Bello, a quien identifican en las investigaciones como el principal socio, prestanombres y operador financiero de Tareck El Aissami Maddah, actual vicepresidente de Venezuela.

Un análisis sobre el mecanismo de corrupción en el programa de alimentación del Gobierno nacional CLAP y su método de control, titulado “Esquema fraudulento de corrupción construido a costa del hambre de los Venezolanos”, elaborado por la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, a partir de que en febrero de 2017 dicha Asamblea Nacional instaló una comisión especial para investigar la corrupción en el programa CLAPS, revela parte de la estructura de Postar.

Según ese esquema, Postar habría comprado productos alimenticios de varios proveedores mexicanos a sobreprecio, y a través de la contratación de firma mexicana CICE coordinaba la logística de ensamblaje ubicada en Veracruz. “Postar pagó a cada empresa de su cuenta bancaria Safra en Suiza”, señala el documento.

En cuanto a los envíos y seguros, se identifica que Postar contrató a la empresa de inspección de envíos francesa Bureau Veritas, la compañía alemana Hamburg Süd y la firma de seguros de carga con sede en Florida PYP International LLC (asociada con Samark Lopez), bajo un seguro de flete que fue sobrevaluado. Para que finalmente la Corporación de Abastecimiento y Servicios Agrícolas (La Casa), supervisada por Corpovex, pagara a Postar un margen significativo, para el desembarque de los productos en Venezuela.

“Nuestros hallazgos revelan como Samark López actuó como testaferro de un esquema que resultó en millones de dólares en pagos en exceso para las cajas CLAPS, lo que probablemente benefició al vicepresidente Tareck El-Aissami y otros”, indica el documento de la Asamblea Nacional, que en 2017 fue desconocida por el gobierno de Nicolás Maduro en 2017, al asignar, mediante decreto oficial, el ejercicio del poder legislativo a la Asamblea Nacional Constituyente.

Tareck El-Aissami, quien ha sido considerado como el probable sucesor de Nicolás Maduro en la presidencia de Venezuela, se ha desempeñado como diputado de la Asamblea Nacional, gobernador del Estado de Aragua, y Ministro de Relaciones Interiores y Justicia durante el gobierno de Hugo Chávez.

Los registros oficiales de ese país indican que Postar Intertrade Limited obtuvo en octubre del 2016 un contrato de adjudicación directa por parte del gobierno venezolano por un monto de 120 millones de dólares, para la adquisición de tres millones de despensas, parte de las cuales las adquirieron en México, durante enero del 2017, a través de la adquisición de productos alimenticios a varias empresas establecidas en territorio mexicanos como son: Grupo Soriana; Value Oriented Services (VOS); La Moderna; Golden Foods, Cereales y Pastas S.A. de C.V.; COPROP S.A. de C.V.; Aktion Trade Services; Comercializadora DTLP y Grupo Pando, entre otras.

En sus análisis se añade que, “el esquema fue diseñado intencionalmente para entregar alimentos de una manera ineficiente y costosa con el fin de maximizar las oportunidades de corrupción”, lo cual se complementa con la indagatoria dada a conocer por el Departamento del Tesoro estadounidense en el que asemeja las operaciones de las empresas Libre Abordo y Schlager Business Group, constituidas en México, que aunque afirmaron tener contratos con el Gobierno de Venezuela para entregar camiones cisterna de maíz y agua a ese país; en realidad sólo habrían enviado aproximadamente 500 camiones de agua (equivalente a la mitad de lo que se contrató) a precios muy inflados.

“Esto no coincide con la cantidad de petróleo crudo PdVSA que fue levantado y revendido por Libre Abordo y Schlager Business Group, valorado en más de 300 millones de dólares”, advirtió el órgano federal estadounidense encargado de administrar las finanzas públicas de ese país.

Los operadores

Álvaro Enrique Pulido Vargas, cuyo verdadero nombre es Germán Enrique Rubio Salas, fue durante varios años, según informes de inteligencia, como uno de los mandos principales del Cártel de Bogotá, quien finalmente fue detenido el 11 de mayo del 2000, con acusaciones en Estados Unidos, Italia y Alemania, por introducción y distribución de drogas en esos países.

Tras ser liberado por el gobierno colombiano a cambio de su colaboración en la identificación y ubicación de diversos capos en ese país, al dejar su país adoptó la identidad de Álvaro Enrique Pulido Vargas, que correspondía a un ciudadano colombiano fallecido el 18 de septiembre del 2005 en Florida. Su vinculación con Venezuela llegó en 2010, y fue a través de la entonces senadora colombiana Piedad Esneda Córdoba Ruiz, tía de Álvaro Enrique, quien mantenía una estrecha vinculación personal y de negocios con Hugo Chávez, y la preserva con Nicolás Maduro.

Desde ese año, Pulido Vargas empezó a realizar negocios a gran escala con el gobierno de Hugo Chávez, principalmente en el ramo de la construcción de obra pública y de vivienda popular, para lo cual junto con su socio y paisano Alex Nain Saab Moran, constituyeron ex profeso una serie de empresas tanto en Colombia, como en Venezuela, Ecuador, España, Hong Kong, Malta, México y otros países. Es uno de los blancos de indagatorias por parte de las autoridades estadounidenses, junto con sus socios.

Alex Saab, quien hasta 2010 era un modesto empresario dedicado a la venta de uniformes de trabajo y llaveros de promoción empresarial, conoció a Álvaro Enrique Pulido, quien lo invitó para hacer negocios con el gobierno venezolano. Amasó en siete años una fortuna.