La ministra muda
Norma Piña está por irse de la Suprema Corte, sin embargo, hay una situación que deja al descubierto cómo es que operó desde el interior del máximo tribunal del país
CIUDAD DE MÉXICO, 08MAYO2023.- Por mayoría de 9 votos de sus 11 integrantes, el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) –Tribunal Constitucional de México– determinó la invalidez del primer decreto de las reformas político-electorales aprobadas por el Congreso de la Unión en diciembre de 2022, impugnado por los partidos políticos de la Revolución Democrática, Acción Nacional, Revolucionario Institucional y Movimiento Ciudadano, así como por el Partido Político del estado de Jalisco denominado Hagamos e integrantes de la LXV Legislatura del Congreso de la Unión. Del análisis sobre la constitucionalidad del procedimiento legislativo correspondiente, las 9 ministras y ministros que votaron a favor del proyecto presentado por el ponente, ministro Alberto Pérez Dayán, coincidieron en que el Congreso de la Unión trasgredió los artículos 71 y 72 de la Constitución Federal. FOTO: SCJN/CUARTOSCURO.COM
/Suprema Corte de Justicia de la Nación
Es evidente que nadie extraña a Norma Lucia Piña, la gris y fallida presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Se escucha cada vez menos de ella y, que por lo visto, hace también cada día menos a pesar de que aun cobra un jugoso salario.
Pues Piña, a quien ya no se le cuestiona desde la 4T, quizá porque ya es historia, acaba de maniobrar al interior de la Corte para deslistar, eliminar de la agenda de votaciones, el proyecto de la ministra Margarita Ríos Fajart que propone eliminar la prisión preventiva oficiosa automática, uno de los asuntos más controvertidos en materia jurídica desde los tiempos de López Obrador.
No se entiende que la discusión y la votación de un tema fundamental para el estado de derecho, haya sido enviada a la congeladora, quizá hasta que la nueva Corte se integre. La razón es sencilla aunque dura de aceptar para quienes se dedicaron a quemarle incienso a la ministra presidenta que saldrá por la puerta de atrás: Norma Piña ya negoció y ahora hasta opera para conceder lo que le sirva para tener una entrega-recepción sin sobresaltos.
