La pobreza desciende
Los resultados dados a conocer por el Inegi sobre la medición de la pobreza en el país son un diagnóstico de los programas sociales
El INEGI debutó con éxito al presentar las cifras de medición de la pobreza. No hay ningún reclamo sobre la metodología ni sobre los resultados que hizo públicos el instituto. En sí mismos es una victoria porque refuerza la confianza y evita politizar la discusión sobre esta nueva responsabilidad del organismo. Lo que sigue a partir de reconocer el importante descenso en la cantidad de personas que viven en pobreza multidimensional en México, es detectar y evaluar las causas de este retroceso.
El mismo estudio muestra que fue el aumento del ingreso lo que permitió a todas esas personas salir de ese nivel de pobreza. Pero en el aumento del ingreso está sustentado básicamente en un factor: las transferencias gubernamentales derivadas en los programas de bienestar. Eso significa que los programas funcionan y cumplen el objetivo para el que fueron diseñados, pero también confirma que son paliativos porque no cambian la realidad de los beneficiarios. La pregunta es evidente: ¿Podrán volverse permanentes, es decir, financieramente viables en el tiempo, más allá del decreto?
