Tiempos de garrote
El gobierno de Donald Trump sigue con su actitud desafiante y, en el caso de América Latina, nadie está a salvo
El presidente Donald Trump eufórico en un evento público
/AFP
La información sobre una nueva acción militar de Estados Unidos contra supuestas narcolanchas en el Pacífico promete un aumento de las tensiones en Latinoamérica del que no está exento ningún país, menos México. Hay quien dice que la amenaza de aranceles y más aranceles ya perdió efectividad por lo reiterado de las prórrogas que el presidente Donald Trump se concede cada vez que se vencerá un plazo, y por eso el uso de la fuerza militar norteamericana, ilegal pero real y palpable, ha ido abriéndose paso como la mejor vía para que le quede claro al mundo que Trump no juega ni tampoco fanfarronea cuando amenaza. El asunto es delicado y aunque el objetivo parece estar en Caracas, nadie en la región puede confiarse y menos sentirse seguro.