Considerando la actual situación económica que en el segundo trimestre registró un desplome de 18.9%, la peor contracción en la historia y que según la encuesta más reciente de expectativas de Banxico señala que la crisis económica que inició en el periodo marzo-abril de 2019 se extenderá hasta el primer trimestre de 2021, es decir que el declive económico será de 24 meses seguidos, se prevé que el gobierno incremente los candados a las donaciones por parte de personas físicas y a empresas, y restringirá más las aportaciones a las organizaciones civiles.
“No creo que el gobierno federal dé más beneficios a las empresas que sean más socialmente responsables”, sostuvo el rector de la Universidad ORT México, Moisés Salinas Fleitman.
El universo de estas organizaciones supera las 9 mil 800 empresas de asistencia social, autorizadas para recibir donaciones deducibles de impuestos y sus tareas son poco supervisadas y ahora ya no se trabaja en conjunto con el gobierno en las diversas tareas que atienden, desde atención a infancia, alimentación, adultos mayores, educación, ecología y derechos humanos, entre otros.
“Cualquier financiero lo sabe. La hacienda pública no ha cedido, ni cederá un milímetro de apoyo gubernamental y más porque la recaudación de impuestos cada día será menor”, indicó Aurelio Salas Márquez, integrante de la Comisión de Desarrollo de Auditoría del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM),.
Con 20 años de experiencia de laborar con las empresas de filantropía corporativa, el miembro del CCPM, señaló que la aportación de las empresas es indispensable. Citó el ejemplo de la empresa Promoción y Acción Comunitaria, mejor conocida como “Paco” que este año vio coronado parte de su esfuerzo en la sociedad, ya que logró que dos niños que sacó de la situación de calle y vivían en una coladera, se titularon.
“Ver a un niño que vivía en una coladera y ahora es un ingeniero, eso no tiene precio”, advirtió Salas Márquez.
Y añade: “Perseverar la especie humana a través de la vacuna es algo que no tiene no se puede evaluar. La Fundación Carlos Slim tiene sus propios recursos. La fundación no necesita recibos deducibles de impuestos (...) Si la Fundación Carlos Slim va a dar 600 millones de dólares, se puede pensar que es mucho pero realmente habría que ver cuánto representa del total de ingresos de la fundación. Tiene sus recursos propios”.
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