Yo sí lo voy a dar, porque es una fiesta de los mexicanos y no es fiesta ni del presidente ni del gobierno. Es nuestra como colectividad y de nadie más.
El grito es una ceremonia cívica jamás interrumpida para recordar a los que nos dieron patria, y se merecen este reconocimiento a cabalidad. Eso quiere decir que es de la ciudadanía y de nuestros héroes, vivo y muertos y no, no se trata de irle a aplaudir a quien esté en el balcón, sino a los que han dado la vida misma por nuestro país. Se trata de recordarnos el porqué debemos estar orgullosos.
Yo estoy orgulloso porque los mexicanos cuando nos unimos, no hay quien nos detenga. Y la mejor demostración es que hoy en día y después de mucho empuje, ya tenemos candidatos independientes y la ciudadanía comienza a unirse y cada vez más, a hacer presiones de justicia (sólo nos hace falta articularnos).
Estoy orgullos por el espíritu incansable de los trabajan el campo. Orgulloso de nuestros activistas que no se venden y a empujones nos van llevando a mejores puertos. Orgulloso de nuestros escritores que nos representan en el mundo. Orgulloso porque nuestros chefs son de los mejores que jamás han existido.
¿Te faltan motivos para estar orgulloso?
Los campeones mundiales de matemáticas, son mexicanos. El ganador del Oscar a mejor director de cine, es mexicano. Los campeones mundiales de lucha libre, son mexicanos. Los campeones mundiales en robótica, son mexicanos. Los campeones mundiales de porristas, son mexicanos. Los campeones de baseball infantil, son mexicanos. Los mejores deportistas paralimpicos, son mexicanos.
También son mexicanos los soldados y oficiales honrados, bomberos y rescatistas y medicos y enfermeras y todos aquellos que diariamente nos cuidan y protegen. Y mexicanos son los hombres y mujeres que ayudan a los migrantes que cruzan nuestro territorio dándoles agua y comida y refugio sin ganar un solo centavo. Y mexicanos son los que no dejan que se nos olviden las injusticias que siguen impunes. Y mexicana es aquella mujer que ayuda a un ciego a cruzar la calle o mexicanos son los topos que viajan el mundo arriesgando el pellejo para rescatar a víctimas de derrumbes.
Mexicanos son los que no se rinden. Mexicana es nuestra riqueza cultural sin igual, de Chiapas a los Tarahumaras. Mexicanos son nuestros tesoros naturales, de minas de plutonio al cañón del cobre. Mexicanos son los empresarios de cepa y los emprendimientos con futuro. Mexicanos son nuestros paisajes, nuestros valles y lagos, nuestras pirámides y playas, nuestras junglas y nuestras Universidades.
Mexicanos son los que son los mejores en cualquier servicio y mexicanos son los que a los turistas los reciben con los brazos abiertos. Mexicanos son los que miran a los ojos, que hablan directo.
Y como mexicano, me da orgullo que nuestra independencia está más cerca que nunca por que hay una creciente y pujante población civil que está arrebatando la batuta a los gobernantes, los está comenzando a vigilar y está marcando lo que nos interesa como colectivo solucionar.
Por eso voy a celebrar al Zócalo. Celebraré a los mexicanos mezcales y nuestros vinos, celebraré nuestra producción agrícola de punta y a nuestros grandes académicos, y a nuestros espectaculares museos.
Celebraré también nuestro sentido del humor, donde no hay un solo albur que no se haga ni un solo chiste que no se cuente y ni un solo meme que no se genere en segundos.
Celebraré por la gente honesta, capaz, preparada, tenaz y resistente. Celebraré que somos más los buenos que los malos, y que poco a poco hemos ido ganando terreno y que cada día somos más conscientes de la discriminación, la corrupción y de la xenofobia, y celebraré que cada día las rechazamos con más fuerza y ya no lo queremos ver como algo “cultural.
Sí, reconozco que estamos políticamente con muchas cosas que corregir. Pero celebraré que poco a poco hemos ido logrando avances muy importantes donde cada vez son más reconocidos nuestros derechos, la tolerancia y las diferencias; la pluralidad.
Celebraré eso y mucho y tanto más, de un país que va mejorando gracias a todos los que se involucran en el diario destino de su nación. Gracias a ustedes, gritaré ¡que viva México!