Mikel Arriola presentó ante la Comisión de Procesos Internos del PRI, su registro como precandidato del Partido Revolucionario Institucional a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, donde aseguró que no “tiene cola que le pisen”. “Es un orgullo obtener mi registro como precandidato del PRI a la jefatura de Gobierno para las elecciones de 2018 (…) He recibido el respaldo de un partido que ha correspondido plenamente con el sentido y el alcance de mi proyecto”, sostuvo. Arropado por la dirigencia nacional, militantes y el precandidato de ese partido a la Presidencia de la República, José Antonio Meade, el exfuncionario federal dijo ver con tristeza el deterioro de la calidad de vida, derivado de la ineficacia de los gobiernos de esta ciudad. El extitular del IMSS afirmó que en un diagnóstico, en 2011 el 67 por ciento de la población consideraba posible ser víctima de robo o asalto en el transporte público y en el 2017, el 86 por ciento, es decir casi 20 por ciento más. Por esta razón, sostuvo que ocho de cada 10 habitantes de la capital del país señala que vivía mejor hace 20 años.
En la sede nacional priista, Arriola sostuvo que en esta ciudad priva una generalizada y creciente sensación de inseguridad, sobre todo en las mujeres. Más aún, resaltó, que la posibilidad de ser víctima de extorsión o secuestro aumentó del 16 por ciento en 2011 al 42 por ciento en 2017. “Debemos estar dispuestos al mejoramiento de nuestra vida pública a partir de la atención de las inconformidades más sentidas de la ciudad (…) No tenemos estructuras clientelares ni cupulares; soy un ciudadano y estoy a tu lado, por eso tomé la decisión de ponerme al servicio de mi ciudad”, aseveró. DA