Tormentas mortales en Asia: suman más de 1000 muertos en Indonesia, Tailandia, Malasia y Sri Lanka

Las inundaciones y deslaves que han golpeado gran parte del sudeste asiático continúan dejando un saldo devastador.

En Indonesia, la agencia nacional de gestión de desastres actualizó este lunes la cifra de fallecidos a 502 personas, además de reportar 508 desaparecidos, lo que convierte este episodio en el desastre natural más letal del país desde 2018, cuando un terremoto y un tsunami acabaron con más de dos mil vidas.

Con esta actualización, el número total de muertos por las inundaciones de la última semana en Indonesia, Malasia, Sri Lanka y Tailandia ya supera los mil, dejando a toda la región en estado de alarma ante la magnitud de la tragedia.

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Carreteras destruidas, aldeas aisladas y apoyo militar para rescates

El gobierno indonesio respondió desplegando tres buques militares con ayuda humanitaria, así como dos barcos hospital hacia las zonas más afectadas, donde muchas carreteras siguen bloqueadas o completamente destruidas.

En la aldea de Sungai Nyalo, ubicada a 100 kilómetros de Padang, capital de Sumatra Occidental, las inundaciones cedieron parcialmente el domingo, dejando casas, cultivos y vehículos enterrados en un espeso lodo.

Los fenómenos meteorológicos extremos que azotaron la región se originaron por lluvias torrenciales prolongadas que afectaron simultáneamente Sri Lanka, Sumatra, el sur de Tailandia y el norte de Malasia, agravadas por una inusual tormenta tropical que intensificó la caída de agua sobre Indonesia.

Desde Sumatra del Norte, el presidente Prabowo Subianto declaró que “la prioridad ahora es cómo enviar de inmediato la ayuda necesaria”, y señaló que existen “aldeas aisladas a las que, con la ayuda de Dios, podremos llegar”.

La administración también ha movilizado helicópteros y aeronaves para apoyar las tareas de socorro en enclaves de difícil acceso.

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¿Es el mayor desastre en su historia moderna de Sri Lanka?

La situación no es menos crítica en Sri Lanka, donde el gobierno reportó al menos 340 fallecidos y decenas de desaparecidos.

El presidente Anura Kumara Dissanayake declaró el estado de emergencia y afirmó que el país enfrenta “el mayor y más difícil desastre natural de nuestra historia”.

Mientras las lluvias cedieron en Colombo este lunes, las autoridades siguen evaluando daños, principalmente en el centro del país, la zona más golpeada.

Helicópteros militares continúan rescatando a personas atrapadas, aunque uno de los aparatos se estrelló la noche del domingo en el norte de la capital.

Las pérdidas son las más graves en Sri Lanka desde el devastador tsunami de 2004, que dejó más de 31 mil muertos.

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Tailandia y Malasia también reportan víctimas y críticas a sus gobiernos

En el sur de Tailandia, las autoridades confirmaron 176 muertos, en lo que ya se considera uno de los fenómenos climáticos más mortales en una década. La población ha criticado la lenta respuesta del gobierno, lo que llevó a la suspensión de dos funcionarios.

En Malasia, las inundaciones en el estado de Perlis causaron la muerte de dos personas, mientras continúan las labores de rescate y evaluación de daños.

Monzones extremos agravados por el cambio climático

Gran parte de Asia atraviesa su temporada de monzones, conocida por provocar inundaciones y corrimientos de tierra.

Sin embargo, los expertos advierten que esta vez la combinación entre monzones y una tormenta tropical excepcional ha multiplicado los efectos destructivos.

El cambio climático también juega un papel determinante: una atmósfera más cálida retiene más humedad, lo que incrementa la intensidad y frecuencia de lluvias torrenciales.

La región continúa en emergencia, con comunidades enteras incomunicadas y equipos de rescate trabajando contrarreloj, mientras los gobiernos buscan contener una tragedia que ya dejó más de mil víctimas en apenas una semana.

QT