El vapor de agua a 100 grados Celsius de una olla arrocera desinfecta con efectividad los cubrebocas de tela, las máscaras quirúrgicas y las mascarillas N95.
Un estudio de la Universidad Case Western Reserve y el Centro Médico VA Louis Stokes Cleveland, en Estados Unidos, descubrió que el tratamiento con vapor es más efectivo que el calor seco o con luz ultravioleta, por lo que utilizaron ollas arroceras y aseguraron que son una buena opción para desinfectar las mascarillas.
El estudio, publicado en el American Journal of Infection Control, no comparó la efectividad del uso de una olla arrocera con agua y jabón, el cual es el método que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC en inglés), recomiendan limpiar los cubrebocas de tela.
Tampoco se examinó el efecto que podría tener sobre el rendimiento de la máscara facial; sin embargo, Curtis Donskey, profesor de medicina de la Universidad Case Western Reserve y principal autor del estudio, aseguró que la opción del tratamiento con vapor es bastante efectiva, segura y rápida.
Incluso es casi tan efectivo como el peróxido de hidrógeno concentrado, un método que MetroHealth utiliza para desinfectar las mascarillas que dan protección para prevenir el contagio de coronavirus.
Donskey afirmó que los métodos usados con agua y jabón, así como el de vapor para la esterilización en el hogar, tienen ventajas y desventajas, por ejemplo, en el tratamiento con vapor existe el riesgo de que la persona se lastime al intentar usar el calor de la olla arrocera.
Mientras que, los lavados constantes de una máscara de tela en una lavadora o a mano podrían desgarrar la tela, y esto las haría menos efectivas. (Con información de Notimex) NR
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