2027: Todos nerviosos

8 de Diciembre de 2025

Karen Torres
Karen Torres

2027: Todos nerviosos

Karen Torres

Karen Torres

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EjeCentral

Todo listo rumbo a la elección intermedia de 2027, donde se renovarán 17 gubernaturas, la Cámara de Diputados, 31 congresos locales y más de 2,400 alcaldías,se reconfigura el mapa político: Morena buscará retener su dominio territorial y legislativo; la oposición PAN, PRI y MC intentará frenar el avance oficialista y recuperar algunos espacios perdidos.

2027 no medirá solo votos: medirá quién controla realmente el país y quién apenas lucha por no quedar fuera del tablero político.

Para el oficialismo, 2027 llega en un contexto donde el desgaste comienza a ser evidente y donde la operación territorial enfrentará su prueba más amplia desde 2018, todo ello a 7 años del surgimiento del Movimiento de la 4ta Transformación.

Por otro lado, para la oposición, será la oportunidad (quizá la más relevante de esta década), de demostrar si puede reorganizarse, si puede hacer trabajo territorial, es la oportunidad de construir una verdadera narrativa opositora y competir más allá de la ilusión partidaria.

La pregunta de fondo es otra: ¿podrá Morena mantener su fuerza operativa y retener la mayoría necesaria para seguir definiendo la agenda nacional en ambas cámaras?

Otro tema que deberá estar en el ojo público y político en estas elecciones, tiene que ver con el mensaje de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre un modelo austero de gobernanza: “nada de nepotismo”, “nada de re-reelección inmediata”,

La prohibición al nepotismo quedó aprobada, pero diferida a 2030, un retraso que para muchos equivale a legalizar “por un tiempo más”, aquello que se presume combatir…

El gobierno que la presidenta Claudia Sheinbaum busca consolidar un discurso desde donde insiste en una administración sin privilegios, sin redes familiares y sin perpetuación de cargos, pero las señales internas aún generan dudas, ahí están los Monreal, los Batres, los Luján, Sansores, Murat y un largo etc…

Rumbo al 2027, el costo político de estas reglas internas de partido, es alto. Mientras las reglas impiden que familias como Monreal, o Salgado se reelijan, la vieja guardia sigue activa, y figuras como Adán Augusto, Fernández Noroña y López Beltrán siguen generando un enorme terreno de contradicciones.

En este escenario, la oposición tiene un reto más urgente que competir y es: reorganizarse. La oposición necesita recuperar orden interno, claridad de rumbo y verdaderos cuadros políticos con voces que encabecen un proyecto real; de lo contrario, llegará a 2027 fragmentada y sin una propuesta que conecte con el país, perdiendo las pocas alcaldías y estados que gobierna en el país.

El PAN habla de “renovarse”, pero su relanzamiento luce más cosmético que estratégico. Para evitar llegar fracturado y sin rumbo a 2027, el partido necesita mucho más que un cambio de imagen. Su nuevo discurso promete:

  1. Reordenar su vida interna — reglas más claras para candidaturas y dirigencias.
  2. Recuperar militancia y cuadros — atraer perfiles que se alejaron por fracturas internas.
  3. Volver a la agenda ciudadana — seguridad, economía y libertades como ejes centrales.
  4. Modernizar su narrativa — lenguaje más directo y menos burocrático.
  5. Mostrar distancia del pasado y del PRI — según apuntan, deslindarse de prácticas que minaron su “credibilidad”.

Al mismo tiempo, el oficialismo enfrenta desafíos clave en materia de gobernanza y Estado de Derecho. Su discurso insiste en garantizar un “piso parejo”, pero sus acciones cuentan otra historia: la intención de desplazar y/o destituir a perfiles opositores con proyección real hacia 2027 como Alessandra Rojo de la Vega, termina siendo contradictoria.

En el intento por restarle fuerza, Morena la coloca precisamente en el centro del tablero político, reconociéndose como una de las figuras más competitivas de la oposición para el próximo ciclo electoral.

La elección de 2027 no será un trámite en medio de reformas electorales: serán unas elecciones que ponen en jaque a la desdibujada oposición, partidos que requieren mayor cohesión política y sobre todo verdadero trabajo en territorio, algo que el oficialaismo ha hecho constante. Mientras morena ya tiene a sus perfiles presidenciables como: García Harfuch, Clara Brugada y Marcelo Ebrard, PAN y PRI, apenas se reorganizan…

Este mosaico deja claro que el 2027 ordenará un nuevo mapa político.Y en ese punto, PAN, PRI y MC llegan ante un reto mayor: si no construyen unidad interna, no generan propuestas creíbles y no ejercen una autocrítica real, podrían enfrentar la contienda con menos estructura operativa y menor legitimidad ante el electorado.

Al final, lo cierto es que Morena llega con tensiones que ya no puede ocultar, y la oposición tampoco puede ocultar que continúa aún sin cuadros presidenciales definidos, ni brújula. Ambos bloques encaran un desafío mayor que trasciende las urnas.

KAREN TORRES AGUILAR

COLABORADORA

@KARENTORRES.MX