Cuba y la crisis venezolana

2 de Diciembre de 2025

Omar Hurtado
Omar Hurtado

Cuba y la crisis venezolana

Omar Hurtado Ok

Si bien no es la primera ocasión en que se menciona la presión que tiene el dictador venezolano Nicolás Maduro, no solamente del gobierno estadounidense, sino también al interior de su país de la élite militar y la inteligencia cubana que, según diversas fuentes periodísticas y especializadas, se encuentra incrustada en sectores estratégicos de seguridad venezolanos, el tema hoy toma relevancia.

Hace algunos días, medios de comunicación replicaron la información difundida por el informativo estadounidense Axios, en la cual la inteligencia cubana podría eliminar al dictador venezolano en determinadas circunstancias, como lo sería una negociada autoentrega a los estadounidenses. Dicha información no resulta comprobarle ni certera en este momento, pero tampoco, para algunos observadores, no estaría alejada de valoraciones de inteligencia, ya que sobran razones y fundamentos que pueden considerar a Maduro de alto riesgo. Axios es un medio de noticias Web de Arlington, Virginia, fundado por periodistas.

La hipótesis, para muchos, no parece descabellada, tanto de una eventual agresión por parte de la élite militar o política/crimen organizado, como por la inteligencia cubana instalada en Caracas, a efecto de evitar que Maduro caiga en manos de las fuerzas de seguridad de Estados Unidos. El dictador es una “Caja de Pandora”, tal cual aquella de la mitología griega, con plena información de acuerdos políticos y militares secretos y geoestratégicos, crimen organizado y narcotráfico, transferencias financieras y corrupción, que en manos de la seguridad estadounidense implica riesgos y vulnerabilidad para muchos y crisis para la sobrevivencia y geopolítica cubana.

A decir de varios especialistas, la inteligencia cubana controla buena parte de los servicios de seguridad y contrainteligencia venezolanas, quienes además cuidan las espaldas del dictador, estrategia implementada por el entonces presidente Hugo Chávez, a efecto de evitar posibles golpes de Estado o traiciones de las fuerzas armadas o de seguridad de su país.

Desde los tiempos de Hugo Chávez, la relación de Venezuela con Cuba ha sido estratégica y vital para La Habana, como fuente externa de recursos, para asegurar petróleo subsidiado, sino es que gratuito, pagos por servicios profesionales de médicos, entrenadores y asesores, así como, proyectos de construcción, agricultura y telecomunicaciones. A pesar de la crisis por la que atraviesa Venezuela, sigue siendo el aliado más importante y la principal fuente de ingresos del Estado cubano.

En el concierto diplomático ambos países se han esforzado por sostener un bloque político antiestadounidense en la región y su influencia ideológica, el apoyo a gobiernos afines en Centro y Sudamérica y en plataformas de Petrocaribe, Alba y Celac, además del Foro de Sao Paulo. La inteligencia cubana está enfocada en proteger al gobierno de Maduro, evitar fracturas internas y contrarrestar operaciones enemigas externas, pero también responde a la propia sobrevivencia cubana.

Si Maduro cae, los beneficios cubanos energéticos, económicos y de seguridad se esfuman, estaríamos frente a mayores tensiones internas sociales en Cuba, peor crisis energética y alimentaria y aislamiento geopolítico. En este escenario, las opciones para Maduro siguen siendo negociar una salida ante la presión estadounidense que garantice ciertas protecciones para él y su élite política y militar o quedar al arbitrio de la decisión estadounidense.

Cabe concluir que, la presencia estadounidense en el Caribe no sólo respondería a la lucha contra el narcotráfico, más bien parece una estrategia para reconfigurar la región desde la óptica geopolítica estadounidense y contrarrestar la influencia de injerencias extrarregionales, léase, por ejemplo, China o Irán, o gobiernos afines a Venezuela.