Una de las tareas sustantivas en estos momentos es la formación de las nuevas generaciones de jóvenes que en breve determinarán la ruta nacional y son tres las disciplinas vitales para ello: el Derecho, la diplomacia y la comunicación. En ese empeño la UNAM se encuentra en la línea de fuego.
La Facultad de Derecho soportó la ola de ataques al Estado de Derecho por la imposición escenográfica de una Reforma Judicial empujada por tómbolas y acordeones además de una reducida participación cívica en las urnas.
Bajo la entonces dirección de Raúl Contreras Bustamante en la Facultad de Derecho, se logró la comunión de los abogados insignes con la población estudiantil para buscar una estabilidad nacional en defensa de la División de Poderes.
Con justa línea académica los estudiantes entendieron que sólo con una actuación profesional soportada en la indiscutible moral y conocimiento de los eméritos universitarios, las instituciones republicanas dan garantía de grandeza.
Por su parte. Alejandro Chanona Burguete al frente de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales se ha empeñado en aplicar la excelencia en dos rutas importantes: Relaciones Internacionales y Comunicación.
Es en los estudiantes de hoy donde descansa la enorme responsabilidad de corregir las rutas muy equivocadas en materia de diplomacia del gobierno federal. Los conflictos orquestados con otras naciones están demeritando la fortaleza internacional y la confianza del mundo en nuestro país. No se puede ya tolerar y acelerar un retroceso que nos ha arrebatado el liderazgo en América Latina y en la participación de organismos internacionales.
Las embajadas no son botín de refugio de personajes impunes a la justicia. Es un sitio de privilegio destinado a los jóvenes universitarios que buscan una carrera diplomática de envergadura. De igual forma, los nuevos periodistas, analistas, reporteros y comunicadores serán la pieza clave para que la información construya realmente una opinión pública sólida.
Somos una nación que se está distinguiendo por dos razones: el constante asesinato de periodistas y el hostigamiento y censura a los medios de comunicación. Por ello se necesitan voces y plumas valientes, pero formadas en las mejores aulas, las de la UNAM.
Alejandro Chanona es un extraordinario internacionalista y conoce a fondo a los medios de comunicación por sus frecuentes colaboraciones en los espacios de mayor audiencia e impacto. Universitario integro, disciplinado, auténtico y de firmes valores. Ambos personajes, Contreras y Chanona, adicional a dejar huella profunda, saben y conocen la estatura de ambas facultades hoy reconocidas a nivel mundial.