OTAN, en guardia por posible escalada rusa

6 de Diciembre de 2025

OTAN, en guardia por posible escalada rusa

Con el argumento de que Ucrania tiene intenciones de fabricar una “bomba sucia”, Rusia podría preparar nuevas hostilidades, alertan líderes mundiales

El acuerdo que permite la exportación de granos ucranianos peligra. A cerca de tres meses del convenio que firmaron ambos países beligerantes en coordinación con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y Turquía, Sergey Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, ha puesto en duda los resultados.

El cuestionamiento se produce días antes de la fecha estipulada para la renovación del tratado, y en este sentido, Lavrov pidió que la ONU proporcione pruebas de que las exportaciones están llegando a los países más pobres del mundo. “Hay mucho trabajo por hacer antes de la firma”, puntualizó.

Ante funcionarios rusos, el ministro también señaló que Ucrania podría estar fabricando una “bomba sucia” con el fin de responder los ataques. “No se trata de información vacía. Hay serias sospechas de que esto está planeado”. Tenemos un gran interés en evitar una provocación tan terrible como esa”, fueron sus palabras.

En su forma más básica, una “bomba sucia” es un arma convencional mezclada con materiales radiactivos, biológicos o químicos, que se diseminan en una explosión. Pero tal afirmación fue rápidamente desmentida por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), quien en voz de su líder Jens Stoltenberg, lanzó una nueva acusación: “Los aliados de la OTAN rechazan esta acusación. Rusia no debe utilizar esto como un pretexto para una escalada”.

Al respecto, Rafael Grossi, el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) aceptó una invitación para mandar expertos a las instalaciones ucranianas, donde Rusia “afirma falsamente” que se está desarrollando una “bomba sucia”.

Por su parte, Estados Unidos, Reino Unido y Francia emitieron una declaración conjunta para rechazar la versión “claramente falsa” de Rusia, y el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmitro Kuleba, insistió en que las inculpaciones eran “absurdas” y “peligrosas”. Con información de AFP.