¿Preocupación real?

Los cinco ingresos al hospital que ya acumula el exprocurador Jesús Murillo Karam, debido a las complicaciones de salud que registraba antes de ser detenido por la Fiscalía el pasado 19 de agosto, ha encendido las alertas en Palacio Nacional y principalmente en la oficina de la Comisión para la Verdad y la Justicia en el caso Ayotzinapa.

La posibilidad de que el extitular de la PGR consiga continuar su proceso en arresto domiciliario o en un nosocomio, preocupa a quienes han insistido en que la detención del exfuncionario, de más de 70 años, representa uno de los mayores “logros” de la 4T en el caso.

Dicen los bien informados que las presiones a jueces donde el exprocurador ha buscado amparo se han intensificado.