El pasado 22 de octubre se realizó en Palenque, Chiapas, el “Encuentro por una vecindad fraterna y con bienestar”, promovido por México en busca de alternativas a la crisis migratoria en la región y en el que participaron los jefes de estado de Cuba, Colombia, Haití, Honduras y Venezuela y representantes de Belice, Costa Rica, El Salvador y Panamá.
Emitieron un Comunicado Conjunto populista e inviable. Algún periodista de manera sarcástica nombró al encuentro como un “Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central”, en alusión al mural de Diego Rivera, en la que los invitados pasearon alegremente por la maravillosa zona arqueológica. El presidente mexicano ofreció sus fulgentes programas Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro. Sin embargo, los resultados tendrán la última palabra.
Reconocieron que la migración tiene causas políticas, económicas y sociales dando cabida a un amplio plan de desarrollo y propuestas que contempla temas alimentario, medio ambiente, agricultura, educación, energía, comercio, inversión y políticas migratorias integrales, etc. A pesar de su amplitud, no hay mención al fortalecimiento democrático y de derechos humanos, que inciden en la migración forzada como en el caso venezolano.
De acuerdo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, las causas del desplazamiento en Venezuela están relacionadas con la presencia de una autocracia arraigada, la destrucción del estado de derecho y sistemáticas violaciones a los derechos humanos.
El control autoritario de Hugo Chávez, continuado por Nicolás Maduro, ha sido posible gracias a la cooptación del poder judicial, que terminó con su independencia. Se agrega el sometimiento de la Asamblea Nacional, las designaciones irregulares de los integrantes del Consejo Nacional Electoral, del fiscal general y del Defensor del Pueblo (ojo México). Con procesos violatorios electorales, Chávez estuvo en el poder de 1999 hasta su muerte en 2013, 14 años, y Maduro desde 2013 a 2025, cumplirá12 años ¿En verdad quiere irse?
La situación política polarizada, severa crisis económica y limitaciones a las libertades civiles han propiciado que alrededor de 7 millones de venezolanos hayan abandonado su país desde 2015, desplazándose a países como Colombia (2.5 millones), Perú (1.5 millones), Estados Unidos (545,000), Ecuador (502,000), Chile (448,000), además de Brasil y México. El desplazamiento responde a la lucha por la subsistencia, a la integridad personal y a la libertad de expresión.
Colofón
En torno a los comicios presidenciales en Argentina, del próximo 19 de noviembre, la coalición “La Libertad Avanza”, dio a conocer un documento de apoyo al candidato Javier Milei, firmado por los expresidentes mexicanos Vicente Fox y Felipe Calderón, con otros expresidentes de América Latina y el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa.
Comentan en la SRE el trago amargo que habría pasado la canciller Alicia Bárcena, derivado de la difusión en X de un manifiesto de apoyo al candidato presidencial argentino Sergio Massa, firmado por la canciller y otras personalidades, difundido por el director general del área denominada DGOMRA, Efraín Guadarrama, cercano al excanciller Ebrard. Como respuesta Bárcena dijo en otro tweet que “en calidad de canciller de México no autorizo la inclusión de mi firma en el documento de referencia”. En otros tiempos ya habría rodado alguna cabeza. No es para menos tratándose de funcionarios de cancillería, por el daño diplomático que estas imprudentes acciones pueden causar a México como país. Si gana Milei ya entramos mal.