Una victoria construida en las sombras

24 de Agosto de 2025

Una victoria construida en las sombras

Su presencia en zonas lejos del control estadounidense y el apoyo de las etnias más importantes son 
sólo algunos de los factores que influyeron en la rápida 
reconquista de Afganistán por parte de los talibanes

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En los 20 años que duró la intervención militar de Estados Unidos, los talibanes, lejos de ser vencidos, se dedicaron a sentar las bases que aseguraron su regreso al poder en tiempo récord.

Entrevistas realizadas por Reuters a líderes talibanes, políticos afganos, diplomáticos y otros observadores, mostraron que los insurgentes le deben la victoria a sus relaciones con funcionarios políticos y militares de bajo nivel, así como con ancianos tribales que ayudaron a que la fuerza de la milicia afgana fuera prácticamente nula.

Y aunque las autoridades estadounidenses aseguraron que la amenaza estaba controlada, lo cierto es que los talibanes siguieron teniendo una fuerte presencia en las provincias más alejadas y en las zonas con amplia tradición islámica. En la práctica, Afganistán tenía dos gobiernos: el apoyado por Estados Unidos y uno más en las sombras, controlado por líderes talibanes que incluso tenían sus propios tribunales y sistemas fiscales.

Aunado al control de territorios donde ya tenían apoyo, en zonas como las del norte y oeste, donde el movimiento ha sido tradicionalmente más débil, se apostó por conquistar a las etnias de una en una, entre las que se incluyen los tayikos, uzbekos y otros. “Tenemos muyahidines (miembros) y combatientes en todas las áreas. Tenemos muyahidines de Panjshir en la provincia de Panjshir, muyahidines Balkhi en la provincia de Balkh, muyahidines Kandahari en la provincia de Kandahar”, dijo Waheedullah Hashimi, un alto comandante talibán, a Reuters.

Asimismo, cada ciudad ganada representaba una doble ventaja: por un lado, los suministros que el territorio podía ofrecer y por otro, la desmoralización entre los ciudadanos de las zonas faltantes. El mensaje cobró fuerza con las ejecuciones de personal clave de seguridad afgano, lo que aumentó la deserción de los elementos militares que debían proteger el país.

De esta forma, más allá de las armas o la propaganda, los vínculos forjados con personas clave, la retirada de las tropas estadounidenses y el súbito corte de apoyo financiero al cuerpo militar afgano fueron los principales factores para la vuelta al poder de los talibanes, en un movimiento que los sorprendió incluso a ellos mismos.