Tras revelarse las condiciones de la mansión en la que habita el hijo mayor del presidente Andrés Manuel López Obrador, José Ramón Beltrán, en redes sociales se dieron a conocer otras evidencias sobre su estilo de vida.
En un video se observa al hijo menor del mandatario mexicano bailando una canción a ritmo de reguetón y como telón de fondo el área correspondiente la alberca al aire libre de 23 metros de largo, “ubicada en su enorme patio trasero, con vista al bosque que se encuentra a espaldas de la residencia”, algo que previamente evidenció el portal Latinus y Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
De esta forma el usuario de Twitter, @DonVocero subió a su perfil este material audiovisual del que es protagonista el hijo del mandatario federal.
Pese a las dudas de que se tratara del mismo sitio, usuarios de redes sociales señalaron la forma de la alberca y la colocación de bardas delimitación como muestra comparativa, además de algunos camastros que también lucen del mismo color y estilo que el video publicado en la investigación.
En contraste, defensores y simpatizantes del gobierno de la denominada Cuarta Transformación se pronunciaron en contra de la difusión de un menor de edad sin consentimiento de sus padres, y más allá de la locación, se enfocaron en que únicamente realizaba algunos pasos de baile, sin ahondar en el cuestionamiento que se hace de la propiedad.
Cabe destacar que, según el portal Zillow.com, la lujosa residencia ubicada en el fraccionamiento de Parkland Village, en Houston, Texas, es la más onerosa
en un kilómetro a la redonda al cotizarse en un millón de dólares.
Según información replicada en varias plataformas de noticias y en redes sociales, la residencia donde habitan López Beltrán y su esposa Carolyn Adams fue edificada en 2015 en un espacio de dos mil 550 metros cuadrados.
Incluso se reveló que si bien la propiedad está a nombre de la cónyuge de López Beltrán, ésta pertenecía hace no mucho, hasta 2020, a Keith L. Schilling, alto ejecutivo de Baker Hughes, la compañía petrolera que tiene nexos comerciales con Petróleos Mexicanos (Pemex) por 151 millones de dólares.
Schilling fue director comercial y de ventas a nivel global de julio de 2017 a noviembre de 2018, en Baker Hughes. Justo en este periodo la empresa transnacional logró dos contratos con Pemex.
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