Las acciones de las aerolíneas listadas en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) se desplomaron este martes a consecuencia del incidente aeronáutico que casi termina en tragedia, así como el jaloneó político en las responsabilidades de este hecho.
Volaris, que fue la empresa que tuvo la mala fortuna de tener dos aeronaves, una despegando y la otra apunto de aterrizar ante la presunta mala información de los controladores de vuelo del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), registró un desplome de sus acciones en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) de 7.85%.
La firma perdió este lunes, 2 mil 798.3 millones de pesos de valor de mercado.
Pero el incidente no sólo afectó a Volaris, también a los papeles de la aerolínea más grande del país, Aeroméxico, los que cayeron 5.95%, que equivale a un descenso de 2 mil 113 millones de pesos en su valor de mercado.
Otra situación que malogró al mercado accionario en el sector aeronáutico fue un informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), que señaló que el transporte aéreo tuvo una inflación de 40.5% anual, que es un golpe bajo en plena recuperación pandémica, lo que no agradó a los inversionistas, ya que frena el potencial de crecimiento.
Las autoridades han iniciado una investigación para determinar las causas del incidente, asimismo mesas de trabajo con especialistas internacionales y nacionales, entre ellos la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), con la finalidad de fortalecer y mejorar de manera continua la seguridad en el espacio aéreo del Valle de México, aseguró en un comunicado.
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