Capacidad, solidez, lealtad y méritos suficientes en Beltrones para encabezar el PRI.
1. Beltrones al PRI.
Tras haber realizado una impecable labor en el impulso legislativo a las doce reformas estructurales tan necesarias para el país, definitivamente, la opción en favor del diputado Manlio Fabio Beltrones para encabezar la máxima fórmula para el CEN del PRI trajo aparejados comentarios más que favorables: es el idóneo en la circunstancia actual, se dice en prácticamente todos los círculos de opinión; el Presidente Enrique Peña decidió personalmente la cuestión y aceptó correr los riesgos que sibilinamente le insinuaron algunos cercanos; también, es notorio que prevaleció la capacidad y solidez del aspirante, en un momento en que el Partido en el poder y el Gobierno necesitan mostrar un rostro diferente.
Se dice que así como la fuga de “el Chapo” minó la popularidad del Gobierno, impactó en la imagen del Presidente y alejó las posibilidades de una solución casera, la incorporación de figuras con solidez y prestigio le permitiría al titular del Ejecutivo Federal detener la caída en los índices de popularidad e iniciar el retorno hacia una mejor percepción. De ello podrán dar testimonio las mediciones que habrán de publicarse en las vísperas del Tercer Informe de Gobierno, lo que sí se puede decir ahora es que la opción por Beltrones ha sido refrescante en el beligerante ánimo mediático.
En el caso de la compañera de fórmula, Carolina Monroy Del Mazo, pocos cuestionan el mensaje: es de casa y del linaje presidencial, va a integrar un sólido equipo con su capacidad de trabajo, lo que equilibra cualquier balance de riesgos en el manejo de las cuestiones políticas.
En este contexto, quienes podrían haber contenido el aliento son los más radicales en los grupos en el poder, el de Toluca y el de Pachuca. El Presidente decidió por lo pronto no dejarles el manejo del Partido a quienes la opinión pública sitúa no sólo en la cercanía cotidiana de Los Pinos, sino también en la carrera por la sucesión presidencial. Al respecto, ha sido peculiar la insistencia de los opinadores sobre si el futuro Presidente del CEN del PRI es también un cuarto de milla habilitado en la carrera, o si llegó para controlar el arrancadero.
A muchos parece no importarles cuántas veces se diga que el árbitro del juego no es un jugador más, dado que los medios insisten en que si puede ser lo será, en tanto no existe algún límite estatutario.
No hay que engañarse; el futuro presidente del CEN del PRI, Manlio Fabio Beltrones, habrá de ser el hombre del Presidente en el juego político que se avecina: abrir el Partido a la sociedad, contender y ganar democráticamente los 12 procesos electorales estatales del próximo año y encauzar democráticamente las aspiraciones de quienes pudieran estar en situación de aspirar al 2018; indudablemente, el primer requisito, que todos respeten al árbitro, está más que cumplido en este caso.
2. Ricardo Anaya al PAN; el PRD, ante su disolución.
Es tal la distancia entre las preferencias vertidas por Ricardo Anaya como presidente del Partido Acción Nacional, que las elecciones del domingo son más un trámite para socializar y dar a conocer a quien, por gran mayoría, habrá de encabezar al panismo en los próximos tres años.
También en el panismo se debate el sentido de una sana distancia o cercanía, en este caso, entre el nuevo dirigente electo y el jefe virtual del grupo al que pertenece, el diputado electo Gustavo Madero. Existe, como son todas las intenciones, la idea de dejarle el espacio mediático al nuevo dirigente nacional, por lo que públicamente el líder moral del maderismo ha dicho que no aspira al liderazgo de los diputados panistas; en el PAN, esta cuestión depende de la voluntad del presidente del Partido en turno, quien designa al coordinador de los diputados.
Es previsible que el nuevo dirigente, el joven Ricardo Anaya, decida modernizar las formas y dejar en libertad a los diputados de elegir a su coordinador, por lo que no es lejano pensar que los diputados panistas opten por exigir a Gustavo Madero que los coordine, lo que estaría estableciendo, eventualmente, una identidad y cercanía que, se sabe, han guardado cuidadosamente desde hace tiempo.
El PRD, por su parte, se enfrenta a su extinción. El efecto disolvente que combinadamente han tenido la hegemonía de “los Chuchos” y el éxodo del señor López para fundar el partido Morena, han puesto al otrora partido de unidad de las izquierdas contra las cuerdas. Ya los números mostraban que, si se sumaba la totalidad de los votos que habían obtenido las diferentes izquierdas, entonces se habría configurado la segunda fuerza electoral. Sin embargo, confrontados y divididos en dos grandes bloques, la izquierda parlamentaria está planteando, otra vez, un esfuerzo de unidad de las izquierdas que, en realidad, se ha convertido en una rendición ante el proverbial señor López.
Lo que piden en primer término es un imposible: que las “tribus” o corrientes que integran el PRD se disuelvan. Nada más difícil de imaginar que los Bejarano (los siempre voraces René y Dolores Padierna) entregaran la estructura de Izquierda Democrática que tanto les ha dejado; o que los propios “Chuchos” desensamblaran la Nueva Izquierda que les permitió apropiarse de los recursos y prerrogativas del partido del sol azteca; ni qué decir de los demás, el Foro Nuevo Sol, los Amalios de Amalia García, Héctor Bautista y la Alternativa Democrática Nacional, etcétera, etcétera.
A la par de la disolución de las corrientes (un contrasentido de la democracia interna en un partido político), los divergentes están proponiendo un diálogo por la unidad de las izquierdas, que así planteado, no es otra cosa que una súplica para que el proverbial señor López recoja los restos del naufragio de las izquierdas sibaritas, muchas de las cuales, instaladas en el confort parlamentario, no cabe duda que han olvidado el aroma de la lucha de clases o de los movimientos populares.
La dirigencia actual se ha disuelto; el XIV Congreso nacional ha sido convocado para, del 17 al 20 de septiembre próximo, elegir una nueva conducción. Por ahí se apuntan como renovadores del alicaído PRD tras la intempestiva renuncia de Carlos Navarrete, algunos que tampoco pudieran ser más grandes que sus propios intereses, como los senadores Armando Ríos Piter o Zoe Robledo, los diputados Julio César Moreno y Fernando Belaunzarán, y hasta la dirigente guerrerense Beatriz Mojica, por citar a quienes se han pronunciado hasta el momento. Con tales renovadores, pareciera que el futuro del PRD es de color Morena.
3. “Flight to safety”.
China, finalmente, reconoció estar en una crisis y entró en el circuito de desliz de las principales divisas de la economía global. El “vuelo a la seguridad” que están tomando los capitales más volátiles en todo el mundo hacia los Estados Unidos, se está dando no sólo por la percepción de mayores riesgos ante la desaceleración de la economía mundial y la transformación del mercado de commodities, sobre todo del petróleo, que ha pasado de los productores al control de los consumidores, sobre todo Estados Unidos, sino también porque está cada vez más cerca la elevación de las tasas de interés, así como un prolongado ciclo de crecimiento en la Unión Americana.
La nueva competitividad que están observando los Estados Unidos, Europa y Japón está apoyada sobre todo en la energía barata y en la disponibilidad de petróleo abundante a bajo precio. En Europa, el incremento en la productividad manufacturera es de un 8%, debido sobre todo a los bajos precios de la electricidad; en los Estados Unidos, los costos de producción se han abatido en un 15% por ese motivo, en tanto que en Japón por similar motivo se ha acelerado su salida del estancamiento, volviendo a crecer de una manera perceptible.
Aún en nuestro país, la baja en los precios de la electricidad ha permitido a varias ramas industriales resistir el deslizamiento acentuado del peso sin tener todavía un impacto en la inflación, lo cual, advierten los industriales, no será posible sostener por un periodo prolongado. De sostenerse el tipo de cambio por encima de los 16 pesos, hacia el mes de septiembre los automóviles, las medicinas, fertilizantes y productos tecnológicos empezarán a resentir el incremento de sus costos, con lo que la inflación podría impactarse al 5% anual.
En ese sentido, la posibilidad de una mayor renta en los Estados Unidos, combinado con la certeza de que nuestro país va a crecer a una tasa más lenta en el futuro inmediato (el banco de México recortó su previsión del crecimiento anual en tres décimas, colocando el dato entre 1.7 y 2.5% anual) es lo que está operando contra el peso.
La elevación de las tasas de interés, según los últimos datos del crecimiento del empleo norteamericano (ha disminuido la creación de empleos) podría suceder en el cuarto trimestre del año, no en septiembre como se ha venido diciendo. Sin embargo, si el Banco de México sigue aguantando la elevación de la tasa de interés hasta entonces, el deslizamiento persistirá cerca de los 17 pesos por unidad, acentuando el declive de las reservas internacionales, que se ubican en torno a los 190 mil millones de dólares ahora, con un declive de 3 mil 500 millones netos en el último semestre.
No parece haber de otra, habrá más presiones en el Proyecto de Presupuesto del 2016. Menos ingresos petroleros, una menor tasa de crecimiento (implica menores ingresos tributarios) y mayor costo del crédito y el servicio de la deuda externa.
4. Perspectivas del discurso.
El discurso que se está manejando ahora, en el sentido de que “nos podría ir peor”, parece apropiado a las circunstancias, si bien no cala en los medios de comunicación, al parecer insertos en su propia lógica de negatividad. Si las finanzas públicas no tuvieran las holguras que tienen, así como el repunte que tuvo el fisco en la reforma hacendaria del 2014, la caída a menos de la mitad del precio internacional del petróleo hubiera puesto de rodillas las finanzas públicas, generando el efecto dominó que se vivió, por ejemplo, en la época del presidente Zedillo, cuando el petróleo tuvo precios por debajo de los diez dólares el barril.
Por otra parte, nuestro eslabonamiento con la economía norteamericana permite aprovechar el ciclo de crecimiento que están teniendo allá, para sostener el auge de las exportaciones manufactureras, que es lo que de alguna manera ha sostenido el mercado interno. Además, el desliz del peso, justificado o no, hace competitivo al país en el exterior, acentuando, por ejemplo, el buen desempeño que está teniendo el turismo, que se ha convertido en la fuente de divisas sucedánea de los ingresos petroleros. De esta forma en el ejercicio del 2014, el saldo neto para el país de los ingresos petroleros fue inferior a 1,500 millones de dólares, en tanto que el neteo en el sector turístico fue superior a los 6 mil millones de dólares.
Es correcto que en la ejecución de las reformas estructurales empiezan a verse los resultados; baja el precio de la electricidad, lo que eleva la competitividad general de la industria y mejora el ingreso familiar; en telecomunicaciones, no se cobran las llamadas de larga distancia y otros servicios de la banda ancha han reducido su precio; el crédito para vivienda se ha abaratado, está en un dígito; la educación de calidad avanza, se están dotando las tablets a los escolares de quinto y sexto grados; ni la política social ni las transferencias a los Estados y Municipios han reducido sus montos no obstante la política de contención y reducción del gasto que este año implicará un recorte oficial de 124 mil millones de pesos, hasta 160 mil millones según se desprende de los informes trimestrales de SHCP.
Empero, en tanto no se trabaje más con los medios de comunicación, en tanto no mejore la interlocución, la negatividad habrá de persistir y proseguir erosionando la confianza y la credibilidad pública.
Por el momento, ha iniciado lo que parece ser una estrategia por fuera de los partidos o a pesar de éstos hacia el 2018, conforme al modelo seguido en Nuevo León con “El Bronco”, en donde se demolió la credibilidad del gobierno y el gobernador, para apoyar después directamente la campaña del candidato independiente. En esa ocasión, al presentar estadística tras estadística en donde se desploma la popularidad, la eficacia y la credibilidad institucional, se estará demoliendo al gobierno y a los partidos políticos para situarlos en el umbral más bajo del aprecio ciudadano, lo que permitirá abrirle el camino al “modelo Bronco”, con él mismo o con algún otro candidato independiente que surja en el camino. En todo caso, como sucedió en España con “Podemos” y “Ciudadanos”, el camino ya está explorado en Nuevo León.
5. Cambios e Informe.
Lo que sigue, entonces, es el Tercer Informe de Gobierno. La solución adoptada en el PRI, al igual que con el perfil del embajador ante los Estados Unidos, Miguel Basáñez, un académico de antaño (del tiempo del gobernador Alfredo del Mazo), sugiere que los cambios procederán poco a poco, considerando piezas eficaces, no necesariamente vinculadas a los vértices del triángulo que rodea al titular del Ejecutivo Federal. La “Triada” o los “triunviros”, como les llaman en los medios, estarían perdiendo terreno a cambio de mayores posibilidades en el placeo que está sucediendo hacia la sucesión presidencial. Ellos no están tan sueltos, no podrían estarlo, como sí están los “outsiders” mejor posicionados, por ahora, en el placeo anticipado de la sucesión presidencial, en donde puntea el sempiterno señor López ahora en su tercera carrera presidencial; le sigue Margarita Zavala y por ahí se ubica también al jefe de gobierno del DF, Miguel Angel Mancera.
Lejanamente, como dirían, con dos cuerpos atrás, se perciben las posibilidades de “El Bronco” Jaime Rodríguez y Miguel Angel Osorio Chong (a la par con el mejor posicionado del gabinete), y un poco más allá (tres cuerpos atrás), Luis Videgaray, Gustavo Madero, Manlio Fabio Beltrones, y entre los gobernadores en activo, más o menos en este mismo nivel, Erubiel Avila, Manuel Velasco Coello y Rafael Moreno Valle, gobernadores del Estado de México, Chiapas y Puebla, respectivamente.
En esta medición del Grupo Reforma, no se registra a Aurelio Nuño, de quien se dice, deberá brincar al Gabinete, posiblemente en la Secretaría de Educación Pública, para figurar entre quienes tienen posibilidades.
Hacia el Tercer Informe, según ha trascendido, se estarían procesando los cambios en el Gabinete. Parece inevitable que en las referencias del mensaje del Informe, estén presentes de una u otra manera los perfiles de quienes pudieran ser considerados en el juego sucesorio.
Otros cambios interesantes en lo que resta del año serían, en noviembre el del Rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, José Narro Robles, en donde se perfila al ex Subsecretario de Relaciones Exteriores, Sergio Alcocer, a quien le compiten el doctor Enrique Graue, director de la Facultad de Medicina y Rosaura Ruiz, directora de la Facultad de Ciencias, esencialmente.
Al final del año, se tienen los casos del Banco de México y el INEGI, en donde sendos funcionarios de la era del PAN, Agustín Carstens y Mario Sojo, siguen encabezando estas importantes instituciones con autonomía constitucional. El Rector Narro, se dice que pudiera incorporarse al Sector Salud, pero no sería una mala idea que pudiera ser considerado para el INEGI.
Finalmente, en la Suprema Corte de Justicia de la Nación se requerirán para diciembre dos nombramientos de nuevos Ministros, dado que Olga Sánchez Cordero y José Ramón Cossío concluirán el periodo de quince años para el que fueron electos. Entre los aspirantes externos que se menciona podrían resultar propuestos por el titular del Ejecutivo Federal para su elección en el Senado, el senador con licencia Raúl Cervantes, así como el ex titular de Gobernación, Santiago Creel Miranda.