Ayer el gobierno de Nuevo León dio a conocer nuevas restricciones para reducir el alza de contagios y decesos por Covid-19, situación que causó malestar entre algunos sectores. Hoy el mandatario Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, defendió las medidas y aseveró que si no se acatan las indicaciones se extremarán y habrá un cierre total.
Fue Manuel de la O Cavazos, titular de la Secretaría de Salud estatal, quien ayer informó que, debido al repunte de casos positivos en el estado, se impondrán horarios para limitar las actividades no esenciales que están permitidas, mismas que se suspenderán los próximos tres fines de semana.
Esto propició que la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Monterrey (Canaco Servitur) y la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) criticaran la forma de actuar del gobierno estatal.
Canaco la catalogó como una determinación injusta y señaló que las autoridades de la entidad no consultaron a los involucrados antes de tomar la decisión sobre este tema. En este sentido, el gobernador neoleonés señaló que “los temas de salud no se consultan, se comunican”.
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Sin embargo, pese a estas voces inconformes, Rodríguez Calderón declaró que se mantendrán las nuevas restricciones al menos hasta el próximo 21 de diciembre. Y apuntó que debido a que no ceden “los niveles de contagio”, se analizó la situación y se decidió aplicar la medida referida.
Si la situación sobre los contagios por Covid-19 no cambia, las medidas podrían ser más estrictas, sostuvo. Por lo que pidió la cooperación de la población y los sectores involucrados en estas nuevas restricciones.
El anuncio de ayer contempla que Call Centers, casinos, centros de eventos sociales, centros ferreteros, ferreterías y tlapalerías, centros y plazas comerciales, cines y autocinemas, gimnasios, estéticas, clubes deportivos, mueblerías, museos, spas, teatros, restaurantes, parques públicos y privados, tintorerías, tiendas departamentales se mantendrán cerrados los fines de semana.
Los servicios médicos y funerarios, seguridad privada, estaciones de combustible, bancos, farmacias, tiendas de conveniencia y abarrotes son los negocios que no se verán afectados por esta medida. GA
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