Un día después de la presunta agresión en contra del fiscal general del Estado de México, investigaciones preliminares indican que el hombre detenido como sospechoso nunca disparó, por lo que se descarta que haya sido un ataque directo o “consciente”.
Según la cronología de lo ocurrido ayer en la tarde sobre la autopista México-Toluca, el conductor de la camioneta negra que interceptó el convoy, compuesto por dos camionetas y una motocicleta, en el que viajaba el fiscal José Luis Cervantes Martínez, comenzó con un “seguimiento cercano y continuo”.
“Acercamientos peligrosos”
El testimonio de los escoltas indica que los “acercamientos peligrosos” del sospechoso conductor iniciaron a la altura del municipio de Ocoyoacac, y concluyeron cerca de la caseta de La Venta-Naucalpan.
En el trayecto de esos 32 kilómetros aproximadamente, la Fiscalía señala que el “agresor” mantuvo los acercamientos laterales y a muy alta velocidad en contra de una de las camionetas del convoy.
Sin embargo, pese a los comandos verbales y físicos que hicieron los elementos de la fiscalía para alejarlo y se desistiera de su conducta de riesgo, este no cesó.
“En respuesta uno de los elementos de escolta exhibió de forma disuasiva el armamento que portaba, ante lo cual, el vehículo agresor impactó la unidad oficial, de manera violenta y en reiteradas ocasiones”, señaló la Fiscalía mediante un comunicado.
¿Quién disparó?
Sin embargo, al ver que la conducta agresiva del conductor se intensificó, uno de los elementos a bordo de la motocicleta disparó a los neumáticos del sospechoso a fin de “inhabilitarlo”. No obstante, en respuesta, el agresor mostró un fusil de asalto AKM 74 con cañón recortado.
A pesar de que ayer en la noche la FGJEM indicó que la “agresión que fue repelida”, fue después de que el conductor exhibió su arma cuando la escolta principal volvió a abrir fuego en contra del vehículo del agresor, aunque no consiguió detenerlo.
Una de las camionetas escolta recibió tres impactos, pero aún no se ha determinado su origen y calibre. Foto: FGJEM.
Fue hasta la bifurcación posterior a la salida de un túnel cercano cuando el presunto agresor que después fue identificado como Julio César “N” fue detenido.
Al menos 31 impactos de bala recibió la camioneta al interior de la cual hallaron el arma, cartuchos útiles, equipo táctico, y droga, identificaciones falsas, entre otros objetos.
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Por lo que hace al escolta que resultó herido en una ingle por las esquirlas de los disparos que los mismos uniformados realizaron, la fiscalía informó que esta mañana fue dado de alta.
Asimismo se pidió intervención de peritos en psiquiatría para identificar el porqué de la conducta del detenido quien estaba intoxicado y se opuso a la detención.
Sin embargo, a partir de los datos de prueba, las técnicas de investigación de cateo, “no permiten establecer que la conducta desplegada por el agresor fue una acción consciente o dirigida en contra del Fiscal General de Justicia del Estado de México”, señaló la institución. JND
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