Host: horror vía Zoom

27 de Abril de 2024

Alejandro Alemán
Alejandro Alemán

Host: horror vía Zoom

alejandro aleman

Era cuestión de esperar. Si gran parte de nuestros días en esta “nueva normalidad” nos la vivimos en una conferencia de Zoom, era de suponerse que alguien, tarde o temprano, haría una película “en Zoom”. Ese alguien es el director norteamericano Rob Savage, y esa película se llama Host.

La trama es simple: seis amigas se conectan a una conferencia de Zoom con el objetivo de hacer una sesión espiritista. Una de ellas, Seylan (Seylan Baxter) es médium y será quien guíe a las demás en el proceso. “Aunque estemos lejos podemos cerrar el círculo y contactar a los espíritus”, dice Seylan. El problema es que casi nadie le hace caso: el resto de las chicas se muestra escéptico y con más ganas de reír que de hablar con los muertos.

Al parecer no hay manera de gobernar a estas chicas, sólo Haley (Haley Bishop) se muestra interesada en guardar las formas, pero las risitas burlonas pronto acabarán de tajo cuando cosas extrañas comienzan a suceder en las casas de todas: desde una luz que se va, hasta una copa que se rompe o una sombra que se ve a lo lejos.

La película encuentra las herramientas para trascender más allá de la novedad: se trata de la primera gran película emanada de la pandemia.

A pesar de las restricciones autoimpuestas, tanto el director Rob Savage como la editora Brena Rangott logran conectar buenos momentos de susto, jumpscares a fin de cuentas, pero bien sembrados durante los menos de 60 minutos que dura la cinta, manteniendo siempre la atención y la tensión del público. Vamos, este es el primer Zoom de toda la pandemia en el que no empiezo a cabecear pasados los veinte minutos.

La cinta es un nuevo eslabón dentro del llamado género del found footage, una evolución de lo que inició en 1999 con The Blair Witch Project (Myrick & Sánchez) y que hoy salta a la computadora con antecedentes claros en Unfriended (Levan Gabriadze, 2014) y Searching (Chaganty, 2018), ambas cintas donde la historia sucede dentro de los límites de un monitor de computadora.

Inevitablemente, Host trae consigo los problemas que casi toda cinta de found footage posee: el emplazamiento imposible o de plano fantasioso de la cámara. En este caso hay al menos un par de secuencias donde no sería factible que la cámara apuntara en tal dirección.

El balance, como sea, es positivo. Host se beneficia del contexto que la crea, la pandemia del Covid-19, y lo utiliza a su favor en referencias medianamente sutiles que sirven para que no olvidemos que el monstruo está allá afuera pero que, en un descuido, lo podemos inadvertidamente invitar a nuestro hogar.

Host se puede ver en Youtube.