Los cancilleres de 18 países y representantes de 16 naciones más integrantes de la Organización de los Estados Americanos (OEA) iniciaron este miércoles en Washington una esperada reunión de consulta para discutir nuevas alternativas y contribuir a una solución negociada a la crisis política, social y económica en Venezuela. La saliente ministra de Relaciones Exteriores de Argentina, Susana Malcorra, dio inicio a la cita a las 19:00 hora GMT, una hora más tarde de lo acordado, en el Salón de los Américas del organismo continental. En tanto, manifestantes protestaron frente a la sede de Washington, previo al inicio del cónclave. La convocatoria de este encuentro, la 29 reunión de consultas de la OEA a nivel de cancilleres, justamente provocó la reacción de Venezuela de iniciar formalmente su salida de la entidad hemisférica, un proceso que tardará dos años en completarse. Pero de último minuto, Caracas se acreditó a la reunión, poniendo fin a un mes de ausencias en las deliberaciones en la OEA. [gallery size="large” ids="757603,757604,757605,757606"] Poco antes del inicio de la plenaria, los cancilleres y representantes sostuvieron un encuentro privado en un salón del viejo edificio, sede de la OEA, en busca de acercar posiciones que puedan llevar a un proyecto de resolución consolidado que pueda ser aprobado por el mínimo requerido de 22 naciones. Las delegaciones de Bolivia, Dominica, Ecuador y Venezuela se registraron apenas horas antes del inicio del encuentro, aunque de ellas solo la primera tendrá representación de secretario de Estado, en la figura del canciller Fernando Huanacuni. Horas antes del encuentro, existían tres propuestas de Declaración que con ciertas diferencias de tono piden que el gobierno de Venezuela desista de su iniciativa de convocar a una Asamblea Constituyente, y proceda a la liberación de presos por razones políticas. Pero el ente hemisférico debe superar sus divisiones internas para poder ofrecer un camino viable al convulsionado país. Dos de los tres proyectos de resolución que fueron propuestos en vísperas de la reunión, hacen un llamado al gobierno del presidente Nicolás Maduro para detener la asamblea constituyente y establecer un calendario para la celebración de elecciones en su país. De igual modo lo exhortan a aceptar el establecimiento de un grupo de contacto para acompañar un nuevo proceso de diálogo. Una resolución ofrecida por Perú, Canadá, Estados Unidos, México y Panamá llama al cese de la violencia proveniente de todas las partes, respeto absoluto por los derechos humanos, cese de las detenciones arbitrarias y suspender el encausamiento en tribunales militares de los civiles detenidos durante las protestas. El borrador de la propuesta de estas cinco naciones establece que el grupo de acompañamiento estará integrado por personas “de dentro y fuera de la región” que sean aceptables tanto para el gobierno de Maduro como por la Asamblea General. Una segunda propuesta presentada por el gobierno de Antigua y Barbuda llamó a la suspensión de la constituyente, aunque hace omisión del tema electoral, una de las principales demandas de la oposición y también ofrece un grupo de contacto para acompañar un nuevo proceso de diálogo y negociación, pero hace omisión de la situación de los presos políticos. La tercera propuesta, presentada en las primeras horas de este miércoles por Guyana, declara la disposición de los países de la OEA por ayudar “para afrontar los profundos desafíos que enfrenta Venezuela, cuando así lo solicite el gobierno de dicho país”. Y ofrece apoyar el establecimiento de un grupo u otro mecanismo de mediación para apoyar “un renovado proceso de diálogo y negociación entre el gobierno y la oposición en Venezuela”. Venezuela vive una alta tensión política desde que estallaran protestas opositoras contra Maduro, el 1 de abril, que saldan hasta ahora al menos 60 muertos y más de un millar de heridos, según la Fiscalía, y casi 3 mil detenidos, de acuerdo con la ONG Foro Penal. (Con información de AFP) EC
16 de Abril de 2024