La presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados ostenta no sólo la representación jurídica de ese órgano legislativo, sino también la moral al erigirse en la responsable de velar por el equilibrio entre las libertades de los legisladores y de los grupos parlamentarios, haciendo prevalecer el interés general camaral por encima de los de grupo o particulares.
Se dice fácil, pero en los hechos resulta extremadamente complejo. De ahí que no todo legislador o legisladora pueda desarrollar esta alta encomienda, pues no solo requiere experiencia y conocimiento legislativos y sensibilidad y visión políticas, sino también calidad moral.
Calidad moral que la o lo coloque en esa alta función de árbitro para dirimir diferencias y convocar al diálogo, al consenso y a los acuerdos en bien de la Cámara de Diputados. Y así lo ha hecho la mexiquense Laura Rojas Hernández, quien a lo largo de este sui generis año legislativo ha enfrentado numerosos retos desde la presidencia de la Cámara de Diputados, los cuales ha sorteado con creces demostrando visión y astucia.
Nada menos, a 30 días de que concluya la alta encomienda para la que fue electa por sus pares legisladores, la presidenta Laura Rojas encabezó la apertura del segundo periodo de sesiones extraordinarias con el único objetivo de elegir cuatro consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), proceso que en los momentos más álgidos de su desarrollo la Junta de Coordinación Política siempre contó con el apoyo institucional de la Presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, contribución a la que se sumó la espléndida dirección que llevó a cabo de la sesión plenaria extraordinaria, enmarcada en la emergencia sanitaria que obligó una votación escalonada, que permitió llevar a buen término la elección de dos mujeres y dos hombres que alcanzaron el acuerdo intergrupal y casi unánime.
Gracias al trabajo profesional, institucional y coherente que desarrolló, Laura Rojas Hernández pasa a la honrosa historia de las y los parlamentarios que han desarrollado un digno papel al presidir la Cámara de Diputados desde 1999, entre los cuales se encuentran Ruth Zavaleta Salgado, Ricardo García Cervantes, Beatriz Paredes Rangel, José González Morfín, Francisco Arroyo Vieyra, Jorge Zermeño Infante y Marcela González Salas y Petricioli.
Los más pobres, víctimas del covid-19
El doctor Héctor Hernández Bringas, investigador del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), detalla que la tasa de mortalidad por este virus en el país es de 32 personas por cada 100 mil habitantes, siendo la CDMX (80.1), Tabasco (79.7), Estado de México (67.5), Baja California (56.6), Sinaloa (51.3), Quintana Roo (48.4), Morelos (43.3), Chihuahua (37.8) y Tlaxcala (32.2), las entidades en donde mayor tasa de mortalidad se ha presentado.
En cuanto a la edad y sexo de los fallecidos, el doctor Hernández Bringas detalla que, por cada 3 defunciones, 2 son de hombres y una de mujeres, de los cuales 64 por ciento corresponde a personas de entre 40 a 69 años, 29 por ciento a 70 o más años y 6.7 por ciento a 40 a menos años de edad.
71.44 por ciento de las defunciones se han reportado en personas con nivel básico de educación (primaria y secundaria), 48.7 cursó la primaria y 28 por ciento con nivel de estudio medio superior y más.
De las 13 mil mujeres que lamentablemente han fallecido, al menos 9 mil 135 eran amas de casa.
Se trata de la radiografía que evidencia las desigualdades sociales que el gobierno federal se empecina en ignorar y con ello, condenar al sufrimiento a los más pobres de México.
Astudillo convoca desde Guerrero a la unidad nacional
Ante la tragedia que vive nuestro país, el mandatario de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, ha dicho que los problemas de salud, económicos y políticos de México requieren de la unidad nacional para su atención y solución.
“Requiere anteponer cualquier interés de carácter político, económico y hasta partidista; requiere poner el interés de la colectividad…”, ha dicho quien predica con el ejemplo, pues se trata de un gobernante que es factor de unidad y concordia en su propia tierra, en donde a base de trabajo y conciliación ha dado la vuelta a diferencias y desencuentros, para privilegiar los acuerdos y entendimientos en favor de las y los guerrerenses.
@jlcamachov