1.
Cumplidas las formalidades protocolarias para el arranque de la LXV Legislatura y la presentación del tercer informe del estado que guarda la Administración Pública Federal, mismo que conforme a las previsiones constitucionales se presenta por escrito al Congreso y conocemos sus alcances por el mensaje al respecto del Presidente de la República, la coyuntura se ubica en la mediana temporal de la gestión de Andrés Manuel López Obrador, quien iniciara con una mayoría parlamentaria calificada más holgada que la mayoría absoluta disponible para el segundo término de su mandato. Esto no es óbice para el gobierno, pues el Ejecutivo federal cuenta con la mayoría suficiente para hacer avanzar sus planes y programas, si bien el tránsito de los mismos por el Congreso habrá de seguir las formas del diálogo y la construcción de consensos propios del pluralismo.
2.
En términos de opinión pública, la medición de la popularidad presidencial se sostiene en torno al 60%, en tanto que los resultados del gobierno, puesto cara a cara frente a lo deseable, registran menor percepción. La economía está en franca recuperación, con la expectativa de superar 6% en el año, si bien la inflación ha sido igualmente alta, en torno también al seis por ciento. Las finanzas públicas gozan de buena salud sin apelar a la deuda pública, reflejando una estabilidad macroeconómica razonable. La política anticorrupción y de austeridad ha acotado cualquier dispendio y fortalecido el gasto social, generando más apoyos al campo y a grupos vulnerables y los empleos se han recuperado casi a niveles prepandemia, pero los efectos adversos en el ingreso y la pobreza siguen siendo perceptibles. Los estudios al respecto muestran que muchos de quienes perdieron su empleo se han ubicado en la informalidad o han encontrado puestos de menor remuneración.
3.
La seguridad pública sigue quedando a deber, si se mide por el número creciente de homicidios violentos y los delitos denunciados ante las autoridades; la educación pública se enfrenta al desafío del retorno a las aulas en el pico de la tercera ola de la pandemia del coronavirus Covid-19, además de que ésta prosigue su marcha pues no obstante el 60% de la población vacunada, la Secretaría de Salud registra 260 mil muertes directamente atribuibles. Como sea, son demasiadas muertes que pesan en el ánimo colectivo y nutren la exigencia de mejores resultados.
4.
De ahí que en la LXV Legislatura, corresponderá a las representaciones tanto de la mayoría como de las minorías en las coaliciones legislativas configuradas, hacer avanzar la agenda nacional. A la par de la revisión de lo acontecido, lo que acontece en la glosa del informe presidencial, habrán de procesarse las iniciativas planteadas en las reuniones previas de las fuerzas políticas; entre las más relevantes, el proyecto de Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos de la Federación y su contrapartida, el presupuesto alternativo anunciado por el bloque de oposición; la iniciativa de ley reglamentaria para la revocación de mandato, y la propuesta de reforma electoral, anticipada por diversas fuentes y que suele suceder después de cada elección plagada de inconformidades entre los grupos políticos contendientes. Es perceptible el debate al respecto, si bien es claro que, sin acuerdo entre las partes, ninguna reforma constitucional podrá alcanzarse. Será entonces por la vía de las reformas legales como algunos cambios podrían materializarse.
5.
En lo que al presupuesto se refiere, es previsible un amplio debate sobre el sentido del gasto, pues respecto de los ingresos hay consenso en torno a lo propuesto por la Secretaría de Hacienda; no habrá más ni nuevos impuestos, se irá sobre la mejora en la recaudación al cerrar huecos a la elusión y rigor ante la evasión, para tener una propuesta general de gasto prácticamente inercial, social y austero.
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