Ministros de Culto cristianos expresaron su “extrañamiento” a colegas de la misma convicción religiosa quienes invitaron a un desayuno navideño a Claudia Sheinbaum Pardo y a Rosa Isela Rodríguez Velázquez, pues consideran que la Jefa de Gobierno “no profesa ninguna fe religiosa y es ampliamente conocida por estar a favor del aborto, del matrimonio homosexual, del feminismo radical y es promotora de la sexualización infantil”, mientras que la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana es “una funcionaria dura, anticlerical y ultraradical”.
Y es que al pastor Cirilo Cruz Lázaro, Presidente de la Confraternidad Evangélica de México (CONEMEX) -quien goza de favores priístas en la entidad mexiquense desde que era gobernador Enrique Peña Nieto-, se le ocurrió invitar a ambas funcionarias para presumir a sus agremiados que no sólo el
pastor favorito del Palacio, Arturo Farela Gutiérrez, líder de la Confraternidad Nacional de Iglesias (100) Cristianas Evangélicas,
tiene derecho de picaporte para mantener un vínculo político-espiritual con Andrés Manuel López Obrador.
En carta dirigida a Cirilo Cruz, pastores y líderes evangélicos identificados con grupos ProVida,
destapan
a Sheinbaum como “principal candidata a la Presidencia de la República” y a Rosa Isela como “probable candidata la Jefatura de Gobierno”, quienes “si no fuera un tiempo pre electoral ninguna de ellas hubiera participado en un evento evangélico (la cena navideña)”. Acusan en la misiva a la Jefa de Gobierno de ser “la principal impulsora de la ideología de género, cuyo propósito es el ataque frontal contra los valores cristianos”.
Según los fundamentalistas abajofirmantes, en el régimen de AMLO “el matrimonio homosexual se ha legalizado en todo el país… se ha perseguido judicialmente a Ministros de Culto por pedir a sus feligreses orar antes de votar… y se penaliza a otros por realizar terapias de conversión”, ambas funcionarias “representan al gobierno que la historia describirá como el mayor destructor de los valores y la cultura cristiana…”, dicen.
Aunque Cirilo y la mayor parte de sus agremiados tienen la misma opinión que quienes suscriben la epístola respecto a la actual administración, e incluso se han pronunciado institucionalmente en ese sentido, lo importante para el líder de CONEMEX es llegar lo más cerca posible del poder para conseguir lo que los priístas le han otorgado durante varios sexenios por su convicción tricolor.
En el liderazgo evangélico existen varios grupos: quienes apoyan incondicionalmente a la 4T; los que están en franca oposición a la política morenista, incluyendo funcionarios, candidatos y legisladores, pues consideran que “el obradorismo es diabólico”… y los que pretenden erigirse como intermediarios únicos entre el pueblo evangélico y el Presidente de la República en turno, no precisamente para ser los voceros de los cristianos que sufren asaltos, extorsiones, desempleo, falta espacios de comunicación, leyes que reconozcan el trabajo social que desarrollan las Iglesias, sino más bien para engrosar su egoteca fotográfica y ser favorecidos con el reparto de plazas laborales y así congraciarse con amigos y familiares… como Cirilo, Arturo y otros, cuyas cuotas son los “cobros de plaza” en época electoral.
Cuando Rosa Isela, Claudia u otros funcionarios o candidatos de la 4T se percaten de que Cirilo y sus cercanos opinan lo mismo que los ProVida -aunque no firmen- las cenas navideñas saldrán de sus agendas.
PALABRA DE HONOR: Pastores evangélicos de las alcaldías Venustiano Carranza, Cuauhtémoc, Gustavo A., Madero, entre otras, instalaron puestos de ayuda para que los peregrinos que iban a la Basílica tuvieran atención médica, alimentos y cobijas este 12 de diciembre.