Norcorea ofrece asistir a JJOO en Corea del Sur

6 de Junio de 2025

Norcorea ofrece asistir a JJOO en Corea del Sur

Desde la zona desmilitarizada de Panmunjom, en su primer encuentro en dos años, ambos bandos expresaron su deseo de abordar otras cuestiones más allá de los Juegos

SKOREA-NKOREA-POLITICS-DIPLOMACY

South Korea Unification Minister Cho Myung-Gyun (L) shakes hands with North Korean chief delegate Ri Son-Gwon (R) during their meeting at the border truce village of Panmunjom in the Demilitarized Zone (DMZ) dividing the two Koreas on January 9, 2018. North and South Korea began their first official talks in more than two years on January 9, focussing on the forthcoming Winter Olympics after months of tensions over Pyongyang’s nuclear weapons programme. / AFP PHOTO / KOREA POOL / KOREA POOL / South Korea OUT

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KOREA POOL/AFP

South Korea Unification Minister Cho Myung-Gyun (L) shakes hands with North Korean chief delegate Ri Son-Gwon (R) during their meeting at the border truce village of Panmunjom in the Demilitarized Zone (DMZ) dividing the two Koreas on January 9, 2018. North and South Korea began their first official talks in more than two years on January 9, focussing on the forthcoming Winter Olympics after months of tensions over Pyongyang's nuclear weapons programme. / AFP PHOTO / KOREA POOL / KOREA POOL / South Korea OUT
El ministro surcoreano Cho Myung-Gyun (izq) estrecha la mano del jefe de la delegación norcoreana Ri Son-Gwon (der) durante la reunión celebrada en la zona desmilitarizada de Panmunjom, en la frontera de ambos países. FOTO: KOREA POOL / AFP

SEÚL, Corea del Sur.- Corea del Norte ofreció este martes enviar atletas y una delegación de alto nivel a los Juegos Olímpicos de Invierno en Corea del Sur, en las primeras conversaciones entre los dos países en más de dos años. Seúl, por su parte, instó a que durante los Juegos de Pyeongchang se organicen también reencuentros de familias divididas por la Guerra de Corea (1950-1953), uno de los legados más delicados de este conflicto. Las conversaciones se celebraron en Panmunjom, la localidad fronteriza en la Zona Desmilitarizada (DMZ) que divide la península. El equipo enviado por el Norte atravesó a pie la línea de demarcación militar hasta la Casa de la Paz, en el lado sur. El ministro surcoreano de Unificación, Cho Myoung-Gyon, y el líder de la delegación norcoreana, Ri Son-Gwon, estrecharon sus manos a la entrada del edificio y, de nuevo, ante la mesa de negociaciones. En línea con las costumbres norcoreanas, Ri portaba una insignia con los retratos del padre fundador de Corea del Norte, Kim Il-Sung, y de su hijo y sucesor, Kim Jong-Il. Cho llevaba una chapa con los colores de la bandera surcoreana. Además de atletas, el Norte propuso enviar una delegación de alto nivel, seguidores, artistas, observadores y un equipo de demostración de taekwondo, dijo a la prensa el viceministro de Unificación del Sur, Chun Hae-Sung. Seúl sugirió que las dos partes marchen juntas en la ceremonia de apertura, señaló, y pidió la reanudación de los reencuentros familiares y negociaciones militares para evitar “enfrentamientos accidentales”. “Ofrezcamos a la gente un preciado regalo de año nuevo”, animó el delegado jefe del Norte. El ambiente era más amistoso que en encuentros pasados, y Cho dijo a Ri que Seúl cree que “los invitados del Norte se unirán a muchos otros de todo el mundo” en las Olimpiadas. “La gente tiene un deseo fuerte de ver al Norte y al Sur avanzar hacia la paz y la reconciliación”, añadió.

“Olimpiadas de la paz”

El tono era radicalmente diferente a la retórica de los últimos meses, con el líder norcoreano, Kim Jong-Un, y el presidente estadounidenses, Donald Trump, intercambiando insultos personales y amenazas de guerra; y los ensayos nucleares y de misiles de Pyongyang. Seúl ha bautizado a la competición en Pyeongchang --a solo 80 km de la DMZ-- como las “Olimpiadas de la paz”, pero para que la descripción tenga sentido es necesario que Pyongyang participe. Kim Jong-Un planteó en su discurso de Año Nuevo la posibilidad de enviar una delegación de deportistas a estos Juegos Olímpicos, a lo que Seúl respondió con una oferta de diálogo. La semana pasada se restableció el “teléfono rojo” intercoreano, tras casi dos años suspendido. Entre los temas que aún hay que definir está la aparición conjunta en las ceremonias de apertura y clausura, la composición de la delegación norcoreana y su hospedaje, que se espera que sea costeado por Seúl. Corea del Norte de momento solo tiene dos atletas calificados para los Juegos, pero cientos de jóvenes animadoras norcoreanas causaron sensación en eventos deportivos previos en el Sur. El grupo podría pernoctar en un crucero en Sokcho, a una hora de carretera de las instalaciones olímpicas, lo que permitiría vigilar y controlar de cerca sus movimientos. En la delegación de alto nivel norcoreana podría estar la hermana pequeña de Kim, Yo-Jong, alta dirigente del Partido de los Trabajadores, en el poder, según la prensa surcorana.

Más allá de los Juegos

Ambos bandos expresaron su deseo de abordar otras cuestiones más allá de los Juegos. Pero Pyongyang ya desdeñó los intentos pasados del Sur de organizar más reunificaciones familiares, al asegurar que no se lo plantea a menos que el Sur repatrie a varios de sus ciudadanos. No estaba claro si el Norte intentó debatir el fin permanente de los entrenamientos militares anuales entre Corea del Sur y Washington. Washington y Seúl acordaron la semana pasada posponer los ejercicios de este año hasta después de los Juegos, en un intento de calmar los ánimos.

Las Coreas reinician diálogo en la frontera, más dos años después

Los gobiernos de Corea del Sur y su vecina Norcorea comenzaron este martes su primer cara a cara en más de dos años, centradas en los próximos Juegos Olímpicos de Invierno, tras las exacerbadas tensiones provocadas por las ambiciones nucleares de Pyongyang. La reunión que se da luego de que el líder norcoreano, Kim Jong-Un, planteara en su discurso de Año Nuevo la posibilidad de enviar una delegación de deportistas a los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebran en Pyeongchang, en Corea del Sur. Seúl respondió con una oferta de diálogo y la semana pasada se restableció el “teléfono rojo” intercoreano, tras casi dos años suspendido. La reunión de este martes tiene lugar en Panmunjom, ciudad fronteriza en la que se firmó el alto el fuego de la guerra de Corea (1950-1953), en la zona desmilitarizada (DMZ) que divide la península. Poco antes de que los cinco miembros de la delegación surcoreana partieran hacia Panmunjom, el ministro de Unificación, Cho Myung-Gyun, afirmó que las dos partes se centrarán en la participación del Norte en los Juegos de Pyeongchang, pero que en la agenda también están previstos otros temas.

Hoy abordaremos la participación de Corea del Norte en las Olimpiadas y Paralimpiadas de Pyeongchang, y también la cuestión de la mejora de las relaciones intercoreanas”, dijo a la prensa Cho, quien lidera la delegación surcoreana.